Educación
Escalada de problemas en las aulas: los incidentes se triplican desde la pandemia
El registro Previ, que recoge las incidencias en clase, se ha disparado en los últimos años y se multiplica por 9 desde que empezaron a recogerse datos

Archivo - Un grupo de niños entran en un colegio. / Marta Fernández Jara - Europa Press - Archivo

Los incidentes en el aula se han triplicado desde la pandemia. En el curso 2020-21 se produjeron 3.600, mientras que el curso pasado hubo 11.353, tres veces más, según los datos proporcionados por Conselleria de Educación.
Esta escalada de problemas en el aula ha motivado la creación de un nuevo decreto de convivencia, que endurece las sanciones al alumnado que agreda a compañeros o profesores y facilita la expulsión del aula. El decreto también permite actuar en problemas que se den fuera del centro pero que estén relacionados con la actividad escolar, como peleas o robos.
A decir verdad, el número de incidentes lleva creciendo desde el año 2013, coincidiendo con una época de mayor conciencia frente a problemas como el bullying, pero es tras la pandemia cuando estos problemas estallan y crecen exponencialmente.
Killian Cuerda, docente y sindicalista de UGT PV, explica que el nuevo reglamento más duro ayudará a los docentes a sancionar estas conductas, pero pide atajar los problemas estructurales de las aulas. "Si en un centro con capacidad para 500 alumnos tenemos 1.200 estudiantes da igual todos los decretos de convivencia que escribamos. Las aulas masificadas no ayudan al buen ambiente en la escuela", explica.
Solo dos tipologías
El borrador se presentó ayer a los sindicatos educativos y afecta también a la red concertada. Sustituye al anterior decreto elaborado por el Botànic y aplica una línea de mano dura frente a las agresiones que lamentablemente son cada vez más comunes.
Además, simplifica las tipologías y las deja sólo en dos: leves (contrarias a la convivencia) y graves (perjudiciales a la misma). No será necesario que un docente abra expediente disciplinario para aplicar una sanción leve, lo que agilizará los trámites.
Una sanción leve puede ser el pasotismo en el aula o no asistir a clase, el hurto, daño a las instalaciones o comentarios fuera de lugar al profesorado. Para las graves hablamos de "actos graves de indisciplina, injurias, acoso o ciberacoso, agresiones físicas, amenazas, robo con violencia, discriminación, violencia de género...".
Un supuesto nuevo son las "actuaciones perjudiciales para la salud o peligrosas para la integridad personal", como los retos virales peligrosos o, como sucedió en Extremadura, el uso de IE para diseños vejatorios (montajes con caras de alumnas sobre cuerpos desnudos).
El texto también recoge la prohibición de los móviles en colegios e institutos (aprobado el año pasado pero que ahora coge rango de decreto), se amplía el rango de acción de los centros a las conductas que se produzcan fuera y se da mayor autoridad al profesorado a la hora de imponer sanciones más duras.
Falta de prevención
El endurecimiento de las sanciones es algo que los sindicatos llevaban reclamando años, con lo que esta medida ha caído de pie entre los representantes de los trabajadores que lamentaban los pocos recursos para contestar a una agresión de un alumno.
Sin embargo, UGT y el Stepv han planteado algunos cambios que no han gustado tanto. El primero es la eliminación de la palabra "Igualdad" del decreto (antes de convivencia e igualdad, ahora solo convivencia). El segundo es la falta de medidas de prevención para mejorar el clima en las aulas y evitar que las agresiones se produzcan.
"Es cierto que ahora podemos expulsar a un estudiante que nos ha insultado y amenazado en repetidas ocasiones, y lo celebramos. Pero debería haber un abanico de acciones que desarrollar para que eso ni siquiera pase y que el clima en las aulas sea pacífico", explica Cuerda. En estos casos habrá medidas tanto judiciales como en lo académico.
El procedimiento conciliado
Una nueva figura es la del procedimiento conciliado, que aparece en los casos que desembocan en experdiente. Si el joven reconoce el daño causado, se compromete a repararlo y acepta la medida correctora, la sanción será de incluso la mitad.
Quedan fuera de esta posibilidad aquellos cuyas conductas sean constitutivas de delito o que hayan protagonizado incidencias de manera reiterada, en cuyo caso no se le rebajará la sanción a la pena.
Otra de las novedades es que se vuelve a poner la figura del profesorado en el centro, como uno de los agravantes de la sanción que pueda tener el alumno. Agredir a un profesor conllevará sanciones mucho más duras.
- ¿Es festivo el martes 24 de junio en la Comunitat Valenciana?
- El batacazo en la PAU dispara el alumnado que irá a segunda convocatoria: 'Estudiantes de 9 han sacado un 6
- La historia clínica única aterriza en la sanidad valenciana: tres hospitales son los primeros en implantarla
- Una tormenta con granizo descarga esta noche en València
- Una ONG valenciana, tras las inundaciones en Aragón: 'No subáis más cosas, los estáis colapsando
- Estos son los colegios más solicitados de la C.Valenciana
- Martes de tormentas y granizo en Valencia: alerta naranja por lluvias 'localmente fuertes
- La mujer que trató de ocultar el disco duro de Ábalos durante el registro de la UCO es una actriz porno