Vito Quiles agita la UV y provoca altercados entre miles de estudiantes

El paso del activista Vito Quiles por la Universitat de València se ha saldado con altercados entre más de un millar de estudiantes de izquierda y derecha frente a la facultad de filología de la UV.

El agitador había anunciado en sus redes sociales este acto dentro de su tour "España Combativa". Sobre el papel, se trataba de un ciclo de conferencias sobre "periodismo y comunicación política", pero la realidad, según fuentes consultadas, es que Quiles ni siquiera había solicitado un permiso formal para realizar tales charlas.

Todas las charlas que han hecho hasta ahora han acabado, como esta, en confrontación entre estudiantes. En este caso, el amplio dispositivo policial con decenas de agentes de la UIP (Unidad de Intervención Policial) de la Policía Nacional ha evitado que la confrontación llegara a ser directa, pero sí que se han dado insultos y amenazas entre ambos bandos durante toda la mañana.

En el caso de la zona del agitador ultra, algunos de los manifestantes han llegado a realizar saludos fascistas y cánticos de esta índole. De hecho, acompañando a Quiles había varios hombres corpulentos de la formación de extrema derecha España 2000, que han actuado como seguridad privada del agitador.

Las razones de los seguidores: Hartazgo y despertar

Cientos de jóvenes acudieron no a una charla, sino a una protesta contra el gobierno progresista y a dar apoyo a Quiles como si de un político se tratase. Los seguidores manifestaron estar "bastante a favor de todo lo que dice", incluyendo sus ideales y cómo percibe la situación actual de España. Consideran que este movimiento es un "despertador de España".

Nicolás, un joven que apoya a Quiles, ya explicó que están "hartos de la corrupción, de políticos que no nos representan". Profundizando en esta idea, los manifestantes critican que los políticos "no tienen ni el apoyo del Parlamento y encima siguen gobernando". Nicolás remarcó la hipocresía gubernamental, recordando que el presidente está "haciendo lo mismo que lo que hizo Rajoy en 2018 cuando le hicieron la moción de censura, pero él no dimite". Además, lamentan que Sánchez lleva prorrogando presupuestos desde 2023, también pese a decir lo contrario.

Otro asistente resumió la situación como "hartazgo de la ciudadanía". Señaló que el público presente incluía gente de partidos diversos e incluso personas sin afiliación, unidos por estar "muy enfadados con todo lo que está pasando" y de las incongruencias e hipocresías del gobierno.

No obstante, entre los propios seguidores existía preocupación por la imagen proyectada. Aunque la mayoría eran hombres, también asistieron mujeres, y varias asistentes indicaron que el movimiento se ve empañado por la presencia de mucha gente "con banderas falangistas o de Franco", algo que "manchar la imagen de los demás" y que no interesa a la mitad de los congregados. Temían que la prensa manipulara la situación y que fueran tachados de extremistas o cualquier otra cosa.

El rechazo de los estudiantes progresistas

Quiles también consiguió encender la rabia de la juventud progresista, que no permitió el paso a la universidad apostándose en la puerta. María, una estudiante de filología, ve en Quiles un "difusor de odio y de ideas ultraderechistas que no tiene cabida en las universidades".

El estudiantado de izquierdas se concentró para evitar que Quiles pudiese entrar y "de alguna manera bloquear las puertas". Alegaron que el motivo principal es que "sus ideas políticas y sus discursos están llenos de falacias de mentiras de odio".

Para estos estudiantes, no podían tolerar que "se estén produciendo este tipo de actos" en la universidad, la cual describen como el "templo del saber". Consideran el discurso de Quiles como un "delito de migración al ser humano", especialmente en una universidad con políticas progresistas.

Alta tensión e incidentes

El acto se preveía de alta tensión y así ha sido. El dispositivo policial de la UIP evitó la confrontación física directa, pero se dieron insultos y amenazas entre ambos bandos durante toda la mañana.

En el momento de máxima crispación, varios jóvenes han lanzado huevos a seguidores de Quiles mientras este hablaba. Algunos asistentes confirmaron que al grito de "han tirado huevos" se produjo un movimiento entre la multitud.

Por otro lado, la tensión se elevó con los grupos de seguidores del activista, que no han parado de amenazar e insultar a los otros estudiantes e incluso a la prensa, con comentarios machistas y denigrantes a algunas reporteras. De hecho, algunos de los manifestantes llegaron a realizar saludos fascistas y cánticos de esta índole. Los seguidores de Quiles agredieron verbalmente a reporteras que cubrían la noticia, llamándolas "puta" y otros calificativos.

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