“Mazón no ha dimitido, lo hemos hecho caer”: Las entidades mantienen el pulso en la calle con otra protesta

El anuncio de la dimisión de Carlos Mazón como President de la Generalitat Valenciana no ha puesto fin a la movilización ciudadana, sino que le ha dado un nuevo propósito. Esta misma tarde, a las 19:00 horas, la Plaça de la Mare de Déu de València se ha convertido en el epicentro de una concentración convocada por Acord Social Valencià , donde la consigna principal es clara: "Mazón no ha dimitit, l'hem fet caure".

La protesta -a la que han acudido cientos de personas- buscaba, por un lado, celebrar la victoria de la calle tras un año de manifestaciones exigiendo responsabilidades por la gestión de la dana, y por otro, advertir al Consell que "el president se va, pero los problemas continúan" , manteniendo la presión y la exigencia de “verdad, justicia y reparación”. 

La dimisión de Carlos Mazón como President de la Generalitat, formalizada este lunes 3 de noviembre, es la culminación de un año de presión social en la calle que tiene su origen en su gestión de la dana de octubre de 2024. El punto de inflexión fue la indignación generada por su conducta durante las horas críticas de la catástrofe. Mientras la C.Valenciana se hundía y se gestaba la tragedia de las 229 víctimas mortales, Mazón mantuvo un largo almuerzo privado en un restaurante, permaneciendo ausente de la emergencia y llegando tarde al Cecopi. Esta percepción de negligencia, sumada a los constantes cambios de versión, cimentó el lema de las protestas: “Mazón dimisión”.

Trece protestas en 12 meses

A lo largo de todo un año se han sucedido 12 manifestaciones (la mayoría multitudinarias) que mantuvieron la presión sin dar tregua al Consell. Desde la primera protesta, que reunió a más de 130.000 personas, hasta las marchas que coincidieron con el aniversario, el clamor por "justicia, verdad y reparación" fue un constante pulso al Mazón.

Este profundo malestar ciudadano llevó del lanzamiento de barro contra el Palau de la Generalitat hasta los abucheos e insultos que Mazón recibió de los familiares de las víctimas en el Funeral de Estado, que marcó un punto de inflexión. Esta presión sostenida en la calle ha forzado finalmente su renuncia. 

"Victoria popular"

La sensación predominante entre los convocantes de la protesta de esta tarde era la de una "victoria popular". Este logro, argumentan, es el resultado del esfuerzo sostenido de "centenares de miles de personas que se han movilizado cada mes" , incluyendo a las familias de las víctimas, las asociaciones de los pueblos damnificados, periodistas y ciudadanos anónimos que "han impedido que pudieran estar tranquilos en ningún momento". La presión generada en múltiples ámbitos ha sido -aseguran- la clave para forzar la renuncia.

Las familias de las víctimas denunciaron que "mintieron y se rieron de nosotros" , no avisaron ni "respetaron a nuestros seres queridos". Por otra parte, reclamaron una "dimisión real y no una recolocación": "si este señor pasa a ser diputado seguirá cobrando y con todos los beneficios incluyendo su aforamiento". Por otro lado, reclamaron que "si no tiene nada que esconder, que vaya a declarar frente a la jueza como se le ha pedido".

La comparecencia pública de Mazón tras su dimisión fue tachada de "infame". y las familias de los fallecidos criticaron su "posición de víctima". "Tiene la desfachatez de decir que no puede más ¿Que no puede más? Tiene la cara de irse a coger una baja laboral cuando a las víctimas se nos está presionando y se nos está obligando a coger el alta para volver a trabajar sin tener en cuenta nuestra salud mental", criticó una familiar visiblemente emocionada.

Las familias criticaron que el president pueda actuar "impunemente" y avisaron de que "la vida humana es irreparable y no vamos a parar hasta que paguen todo el dolor y miseria que han causado".

Un nuevo propósito

El movimiento de protesta ha demostrado que su objetivo va más allá del castigo individual. La respuesta inmediata a la dimisión del President ha sido la convocatoria de una nueva manifestación. Esta acción marca un cambio de foco: de la exigencia de dimisiones a la demanda de soluciones efectivas y urgentes. Las asociaciones de afectados entienden que la crisis no se resuelve con el cambio de líder, pues persisten la lentitud en las ayudas, la falta de transparencia en la reconstrucción y la necesidad de depurar responsabilidades institucionales más allá de la figura de Mazón.

Continuar la lucha

En este contexto de celebración contenida, el movimiento social deja claro que la dimisión es solo el primer paso. El lema que impulsa la protesta ("Mazón se va, pero los problemas continúan" ), se traduce en una serie de demandas . Estas incluyen la reconstrucción de las poblaciones afectadas con participación ciudadana, la implementación de planes de choque para la reparación inmediata de viviendas, colegios e infraestructuras y "no dejar a nadie atrás". El objetivo final es la "reconstrucción social" y la exigencia de responsabilidades que van más allá del President, alcanzando a su Consell, el PP, VOX y al entramado empresarial que "ha sacado beneficio económico de la muerte".

La manifestación de esta tarde marca el inicio de esta nueva fase, con una reunión convocada para el próximo 9 de noviembre en el Parque Alcosa, en el corazón de las zonas afectadas. "Continuar la lucha es la mejor manera de honrar la memoria de nuestras familias. Verdad, justicia y recuperación social", sentenciaron los convocantes.

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