Tres duelos. Apenas un cuarto de hora. Es lo que duró la «batalla de gallos» programada para el pasado domingo por la noche por el Ayuntamiento de San Antonio de Benagéber para sus fiestas municipales en honor a San Isidro y San Roque. Fue exactamente el tiempo que tardó el alcalde, Enrique Santafosta (Aisab), en suspender el evento al encontrar inapropiado el lenguaje empleado por los raperos participantes, una circunstancia prácticamente igual a la que ocurrió justo una semana antes en Cullera, donde su alcalde, Jordi Mayor (PSPV), también interrumpió las actuaciones para cancelarlas bajo la misma argumentación: el lenguaje usado era soez, machista y xenófobo.

En San Antonio de Benagéber la cita tuvo lugar a alrededor de la medianoche del domingo en la plaza Mayor del municipio. A esa hora estaba preparada una «batalla de gallos», una serie de duelos entre raperos en los que los participantes se retan utilizando rimas improvisadas. Justo antes se había celebrado allí un espectáculo de magia. Cuando comenzaron los duelos entre raperos, las expresiones empleadas sorprendieron a algunos asistentes que se encontraban en la plaza, en una ubicación abierta y con todo tipo e público. Uno de ellos, al parecer, fue el propio alcalde, Enrique Santafosta, que al tercer envite decidió cancelar el evento. No obstante, la fiesta continuó con la discomóvil programada a continuación.

Según explicó Santafosta a Levante-EMV, los participantes, que debían tener entre 14 y 35 años, no cumplieron con las normas que se les había planteado para que se celebrara esta «batalla de gallos», entre las que se explicitaba que «no se permitirán expresiones y comportamientos que atenten contra los derechos de las personas (expresiones homófobas, xenófobas, insultos, etc...)». «Nos pidieron realizar una actividad y la permitimos con unas normas. Al no cumplirse, se suspendió», finiquitó Santafosta.