En plena lucha contra la despoblación en el ámbito rural, la Generalitat ha decidido sacar a la palestra las posibilidades que ofrece el Parc Natural del Túria. Si bien la mayor parte del terreno de este parque no está ubicado en el interior, la próxima ampliación propuesta por el Consell sí que incluirá a Chulilla, Gestalgar y Bugarra. Por ello, la Agencia Valenciana de Turismo promocionará el potencial del Parc Natural del Túria entre los países europeos como ejemplo de turismo rural. Así, se podría diversificar y complementar la oferta actual, que se encuentra basada prácticamente solo en el sol y playa. Además, está previsto que esta idea, que forma parte de una experiencia piloto, se extienda al resto de parques naturales de la Comunitat Valenciana.

La Generalitat ha encargado al departamento de Economía Aplicada de la Universitat de València un plan director sobre el potencial que ofrece el Parc Natural del Túria como reclamo turístico entre los habitantes de la Unión Europea. El objetivo: generar una mayor actividad económica en los municipios por los que pasa el río que, a la larga, podría incentivar la supervivencia de la población rural en su ribera. Con esa premisa, la Agencia Valenciana de Turismo ya se ha reunido con la Asociación de Municipios Vinculados al Parc Natural del Túria para que éstos puedan colaborar con la puesta en marcha del proyecto.

El plan director turístico que llevará a cabo la Universitat de València tiene previsto explorar nuevas vías de explotación de los recursos patrimoniales y ecológicos que ofrece el río Turia y su entorno, a los que habría que añadir otros atractivos como la riqueza patrimonial de los municipios que se encuentran a su vera.

Actualmente, el Parc Natural del Túria, que fue declarado como tal en el año 2007, se extiende a lo largo de alrededor de 4.700 hectáreas repartidas entre las comarcas de l’Horta, el Camp de Túria y Los Serranos, que se ampliarán a unas 8.000 con la incorporación de Chulilla, Gestalgar y Bugarra.

Esta extensión comprende tres masas boscosas que cuentan con una gran biodiversidad. Se trata de la Vallesa, les Rodanes y la Pea. En ellas, los visitantes pueden descubrir a menos de una hora de València múltiples especies vegetales del bosque mediterráneo como el pino carrasco, orquídeas, olivillos o alcornoques, e incluso también algunos chopos, álamos o sauces en algunas pequeñas extensiones de bosques de ribera a lo largo de los márgenes del río. Asimismo, son comunes ardillas, jabalíes, lagartos ocelados e incluso zorros, y una gran variedad de aves. Su relevancia desde un punto de vista medioambiental llega a tal punto que muchos consideran el Parc Natural del Túria, junto al de la Calderona, como uno de los «pulmones» de la ciudad de València.

Rutas, deporte, playas...

El Parc Natural del Túria ya cuenta hoy en día con una amplia y variada oferta de ocio que se expande por todas las localidades por las que discurre. Así, por ejemplo, son muchas las rutas señalizadas por las que se puede realizar senderismo desde Chulilla -con la Ruta de los Puentes Colgantes, por ejemplo- a otros municipios como Vilamarxant o Benaguasil, en el Camp de Túria. En ese mismo sentido, Riba-roja de Túria incluso organiza rutas nocturnas a la luz de la luna.

Por otra parte, los deportistas más atrevidos disponen de caminos para practicar carreras de montaña, tanto a pie como en bicicleta, o de un río que se puede navegar en kayak o piragua. Opciones con mayor descarga de adrenalina son las que proponen en Gestalgar o Chulilla con la escalada en paredes prácticamente verticales o la práctica de espeleología en cuevas con una gran riqueza geológica. Mientras, los más sosegados pueden gozar de las oportunidades que brinda la pesca deportiva o el cicloturismo, o incluso pueden aprender a montar a caballo.

Y para los que echen de menos la playa, también las hay continentales, como las de Bugarra y Gestalgar en el cauce del río Turia, en las que los visitantes pueden bañarse en aguas dulces y transparentes rodeados de peces.

Todas estas actividades pueden convertirse en las principales herramientas para fomentar el turismo de interior y luchar contra la despoblación rural.