El Partido Popular de Riba-roja ha acusado al alcalde, el socialista Robert Raga, de «pagar sus venganzas personales con el dinero de todos los contribuyentes», tras conocerse que el consistorio «ha sido condenado por negar la reincorporación a un funcionario que estaba en comisión de servicios». Una sentencia que según los populares, en su fallo, «anula el pronunciamiento de la Junta de Gobierno por considerarla no conforme a Derecho, reconociendo como situación jurídica individualizada su derecho al reingreso en el puesto, y a percibir las retribuciones inherentes al mismo desde la fecha de su solicitud de reingreso».

Mª José Ruiz, portavoz popular, califica la actuación del alcalde de «cacicada marcada por el rencor personal» y subraya que en este caso «confluyen demasiadas casualidades». Por una parte, «el funcionario al que desde el Ayuntamiento se ha negado el reingreso es el mismo que en 1989 recurrió y revocó la plaza de policía local concedida irregularmente al actual alcalde Robert Raga». El aspirante consiguió en los tribunales entonces «dicha plaza y una indemnización». Por otra parte, «el asesor jurídico externo que validó la plaza para Raga en 1989, fue contratado por éste de nuevo al acceder a la alcaldía y realizó el informe denegando la reincorporación».