La Guardia Civil de Llíria ha detenido en Vilamarxant a un hombre y una mujer por el presunto robo de joyas y tarjetas de crédito a los usuarios de una residencia de la Tercera Edad. Al parecer, según informó la Benemérita, la arrestada, de 39 años, aprovechó durante los años 2016 y 2017 que trabajaba en un centro geriátrico para hacerse con las tarjetas, con las que realizaban compras sin la autorización de los titulares o sacaban dinero en efectivo. Asimismo, se les acusa de sustraer joyas a los residentes para después venderlas.
La operación, denominada «Marxaina», se inició tras recibir la Guardia Civil varias denuncias en el mismo municipio de Vilamarxant, la Pobla de Vallbona, Benaguasil y Xirivella por cargos no autorizados en tarjetas bancarias, hurtos y falsificaciones.
La investigación de los agentes del Instituto Armado acabó por identificar a una mujer de 39 años y un hombre de 45 -que, al parecer, era su pareja sentimental-, como los presuntores autores de 14 delitos de estafa mediante el uso fraudulento de tarjetas de crédito, hurtos, falsificación de documentos y usurpación de estado civil.
Según indicó la Guardia Civil, la detenida aprovechaba su empleo al cuidado de personas mayores que se encuentran física o psicológicamente impedidas, y que incluso en algunos casos se encontraban cerca de fallecer, para hacerse con sus enseres. Es más, los agentes, según aseguran, han podido constatar que la mujer detenida mantuvo una frecuente actividad de venta de joyas que coincide con los contratos mantenidos con empresas del sector geriátrico. Además, la misma mujer mantiene antecedentes por hechos similares.
Asimismo, además de las joyas, los arrestados habrían utilizado los datos bancarios de las víctimas para realizar pagos, sustraerles dinero en metálico e incluso contratar servicios de telefonía móvil a nombre de los damnificados para su uso personal y el de su familia.
Una vez identificados a los presuntos autores de estos actos, los agentes de la Guardia Civil realizaron dos registros domiciliarios en Vilamarxant, donde residen los dos detenidos. Una de las circunstancias que habría delatado a los arrestados es que en el momento en que se produjeron los registros domiciliarios, se halló la instalación y el uso de un paquete de telefonía con servicio de internet, teléfono fijo y varios teléfonos móviles a nombre de una mujer con demencia senil que estuvo ingresada en la residencia de la Tercera Edad en la que trabajaba la acusada. En estas intervenciones se incautaron de equipos informáticos, telefonía móvil, documentación y joyas.
La procedencia de las joyas
La investigación de la Benemérita continúa ahora para determinar la procedencia de estas joyas, ya que sospechan de que podrían ser propiedad de algunas de las personas mayores que se encontraban en la residencia donde trabajaba la acusada desde el año 2015.
A su vez, durante la operación también ha sido detenida la pareja sentimental de esta mujer, al que se le acusa de participar en tres delitos de estafa por cargos en tarjetas o cuentas bancarias que, según infiere la Benemérita, están relacionados directamente con los delitos denunciados.
