Las redes sociales resultan peligrosas. Incluso cuando se trata de emplearlas contra una injusticia social. Eso lo sabe ahora el concejal de Riba-roja Pot, Andrés Fernández, que ha sido reprobado por el pleno municipal por publicar en ellas una fotografía de un indigente que dormía en la calle y, según denuncia el equipo de gobierno formado por PSPV, Compromís y EU, no socorrerlo.

Los hechos se remontan al pasado 13 de mayo, cuando Fernández publicó la mencionada imagen acompañada del siguiente mensaje: "Nuestro alcalde prefiere pactar con Ciudadanos, la realidad es que en la calle la precariedad es galopante, la desigualdad es aberrante y los derechos conseguidos por la lucha de tantas personas en el pasado se van diluyendo gracias a PP, Ciudadanos o PSOE, siento vergüenza al saber que hay gente que necesita ayuda y no se le da". Sin embargo, el gobierno actual le acusa de que, tras tomar la fotografía, en ningún momento se puso en contacto con la Policía Local, con los servicios sociales, el centro de salud o la Guardia Civil para alertar sobre la salud de esta persona y, por tanto, prestarle la ayuda correspondiente.

La moción aprobada por el pleno recalca el protocolo por el que una autoridad como es el caso de un concejal, en el gobierno o en la oposición debe cumplir: "en situaciones de emergencia con personas en riesgo, si existe riesgo de seguridad de inmediato avisamos a la Policía Local y a la Guardia Civil, si hay lesiones o riesgo para la salud avisamos a los servicios sanitarios, si la persona en cuestión está en situación de desprotección se actúa en función del caso y del grado de desprotección; en todos los casos se acompaña a la persona hasta que es atendida".

Además, en un comunicado, el gobierno municipal acusa a la formación Riba-roja Pot de utilizar "hasta la última de las situaciones dramáticas de una persona para atacar al actual gobierno" y realza su "apuesta por las políticas sociales, con un banco de alimentos propio, comedor social y acuerdos para situaciones de emergencia para que puedan dormir y no estén en la calle, por eso la importancia de que el concejal hubiera avisado a cualquier de los teléfonos de emergencia y solucionar el problema de esta persona".

Por su parte, el concejal reprobado, Andrés Fernández, ha explicado a Levante-EMV que hizo la fotografía "porque me entró una sensación de mal cuerpo al ver a un hombre allí durmiendo y ver que el gobierno se ha olvidado de las demandas sociales". Por eso, justifica que hizo "una denuncia política, sobre todo porque se rechazó la compra de viviendas para estas personas".

En cuanto a si prestó ayuda al indigente, Fernández señaló: "Lo que hice por esa persona no tiene ningún interés porque esto lo hacemos de forma desinteresada. No me gusta alardear de ello porque no estoy para eso".

No obstante, el edil de Riba-roja Pot ha manifestado que se siente "triste" por lo sucedido e insiste en que no le parece "justo". "La reprobación realmente me la hacen por ser incómodo para el gobierno y por nuestra labor de fiscalización", aduce. Además, mantiene que no descarta querellarse contra el equipo de gobierno al entender que no tiene ninguna prueba de que no socorriera al indigente fotografiado.

En la misma línea ha declarado el portavoz de Riba-roja Pot, Rubén Ferrer, que entiende que el equipo de gobierno ha hecho de esta situación "una utilización política" porque el alcalde, Robert Raga, ha de declarar próximamente como investigado por la adjudicación de un contrato de asesoría jurídica del ayuntamiento. Además, insiste en que la denuncia contra su compañero Andrés Fernández es "falsa" y "sin ninguna prueba".