El Ayuntamiento de San Antonio de Benagéber ha hecho efectiva esta mañana durante un pleno extraordinario la dimisión de la que hasta ahora era su concejala de Fiestas y Servicios Sociales, Eva Tejedor. La edila presentó su renuncia al acta el pasado 17 de agosto -un día después del fin de las fiestas patronales del municipio- con una carta en la que se quejaba del «mal trato» recibido por parte del consistorio, que precisamente está dirigido en minoría por el que hasta el momento era su partido, la Agrupación Independiente de San Antonio de Benagéber (AISAB), con el apoyo de una regidora del PSOE.

Tejedor, que ha estado en el cargo durante tres años, señaló en la misiva que renunciaba al acta «para cortar definitivamente con el ayuntamiento» y argumentaba que durante ese tiempo ha tenido que ejercer sus funciones delegadas «sin el apoyo del equipo de gobierno», lo que, según esgrimía, le ha ocasionado «un constante desgaste personal». «La consecuencia es que mi salud se está viendo perjudicada y en último término mis relaciones personales se ven afectadas», indicaba.

Ante las acusaciones vertidas por Tejedor, el alcalde, Enrique Santafosta, ha defendido que él ha trabajado «duro e intenso para ayudar en todas las áreas». «Lo pienso firmemente, me he dejado la piel en todas las áreas para apoyar al máximo», ha reivindicado a la vez que ha asegurado que no se siente «identificado» por la denuncia de la ya exconcejala.

Por su parte, el portavoz del principal partido en la oposición, Ramón Orozco (Plataforma-Guanyem SAB-Compromís), ha criticado la «tensión y las continuas broncas» existentes dentro del gobierno de San Antonio de Benagéber.