La última convocatoria pública de subvenciones que ha sacado el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ha provocado las críticas del PP, que ven en ella una estrategia para favorecer el negocio de Rafa Folgado (Compromís), uno de los concejales del equipo de gobierno.

El conflicto surge de unas ayudas valoradas en un total de 8.000 euros para la compra de bicicletas convencionales o eléctricas y kits de conversión de ciclos urbanos en eléctricos entre el 1 de diciembre de 2018 y el 30 de enero de este 2019 con el objetivo de promover la movilidad sostenible entre sus habitantes. Entre aquellos que opten a la subvención, las bases priorizan a los casos en que la adquisición se haya realizado en un negocio del municipio y que la tienda esté adherida en cualquiera de sus asociaciones de comerciantes.

Precisamente, según criticó el PP, Folgado mantiene uno de los tres únicos negocios de este tipo en la localidad. Según denunció la portavoz del PP, María José Ruiz, esta subvención estaría destinada a favorecer finalmente la compra de productos en la tienda de Folgado. «Existe un claro clientelismo político en Riba-roja y el alcalde, Robert Raga, es responsable», criticó.