El PSOE de Riba-roja de Túria construirá un nuevo centro de salud en la zona del Pacadar gracias a los 60.000 metros cuadrados que obtendrá la localidad en un espacio en el que estaban previstos cerca de 550 viviendas levantadas en plantas de cinco alturas y ático en un emplazamiento que antaño fue industrial.

El proyecto sanitario, según asegura la candidatura, está muy avanzado ya tras las conversaciones del grupo socialista del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria con la Conselleria de Sanitat Universal, encabezado por Ana Barceló, también del PSOE, y que pondría fin a los problemas de accesos del actual centro, junto al Barranc dels Moros, cuyas dimensiones se han visto desbordadas a pesar de que cuando se inauguró, en el año 2000, diversos colectivos sociales alertaron sobre el mismo ya que estaba enfocada para 13.000 habitantes y actualmente supera los 22.000 empadronados.

Entre las deficiencias que se han arrastrado año tras año se encuentran los problemas de acceso, una carencia patente de rampas para personas con movilidad reducida o los problemas para el paso de carros de bebés gemelos dadas las exiguas dimensiones de las aceras de las calles adyacentes. Además, el centro también presentaba deficiencias en algunas zonas del mobiliario, falta de espacio para dependencias como la sala de extracciones y un área de aparcamiento insuficiente para absorber el parque automovilístico de los pacientes y el personal médico, según denuncia el grupo socialista local.

El nuevo emplazamiento del Pacadar servirá para atender a los pacientes del área dependiente del Hospital de Manises, con el personal necesario para descongestionar el exceso de trabajo cuyos facultativos soportan más de 1.700 pacientes por cartilla y con un número adecuado de salas y consultas médicas. Además, también se ha previsto un área de rehabilitación para los pacientes que, dada la cercanía con el complejo deportivo de la Mallà, dispone de parking y parada de bus que conecta con el metro.

El candidato socialista a la alcaldía, Robert Raga, ha afirmado que las futuras instalaciones sanitarias "supondrán saldar una reivindicación de todos nuestros vecinos que durante años han tenido que soportar la decisión del Partido Popular de instalar un centro de salud en el peor emplazamiento posible, con accesos deficientes y tercermundistas y una carencia de espacio en el edificio".

Raga ha recordado que en el año 1994, bajo el gobierno del entonces alcalde Joan Antoni Toledo, se suscribió un convenio con la Conselleria de Sanitat para la cesión de 3.000 metros cuadrados en la Mallà. Al documento se le adjuntaban 2.000 firmas por las que los vecinos reclamaban un centro de salud acorde a las necesidades de los vecinos de Riba-roja de Túria. Sin embargo, en 1999 el Partido Popular modificó la decisión y cambió la ubicación junto al barranc dels Moros, según criticó.