El Ayuntamiento de Bétera cerró ayer al público la piscina infantil municipal después de que la Conselleria de Sanidad le haya advertido de que los niveles de cloro del agua que presentaba no eran los adecuados para el baño. La causa de esta situación, según ha revelado la recién estrenada concejala de Mantenimiento de Edificios Públicos, Eva Martínez, es que el vaso directamente no contaba con un sistema de cloración. «Lo que se estaba haciendo era vaciar y llenar la piscina cada día», explicó, un trabajo que Sanidad advirtió de que era insuficiente para eliminar los posibles focos de bacterias que pudiera albergar la instalación. Dos controles realizados la semana pasada confirmaron estas advertencias.

Para solventar el problema, Martínez anunció ayer a este diario que en los próximos días se instalará un sistema de depuración para clorar la piscina y que ésta mantenga los niveles de cloro oportunos. La concejala, asimismo, aseguró que la clausura de la instalación durará «solo unos días» e insistió en que han reclamado celeridad a los trabajadores para poder ofrecer este servicio a sus vecinos cuanto antes.

El contratiempo ha surgido precisamente en pleno verano, después de haber pasado dos olas de calor en las que las temperaturas han superado los 35 grados en buena parte de la Comunitat Valenciana. De hecho, el propio Ayuntamiento de Bétera decidió abrir el pasado fin de semana sus piscinas públicas de forma gratuita a todos los vecinos para que pudieran refrescarse ante el agobiante calor.

Ante esta circunstancia, Martínez -que apuntilló que ésta ha sido una situación sobrevenida con la que se ha encontrado cuando apenas lleva unas semanas al frente de la concejalía- quiso pedir «perdón» a los usuarios por las molestias ocasionadas por el cierre de la instalación. «Pero es completamente necesario para la mejora del servicio y la Conselleria de Sanidad nos obliga a hacerlo porque los niveles de cloro no eran los adecuados», añadió.