El Ayuntamiento de la Pobla de Vallbona aumentará el número de concejales liberados en esta legislatura. La medida, según informó el consistorio, busca mejorar la gestión municipal con responsables políticos que tengan dedicación exclusiva y que puedan controlar en el día a día las competencias delegadas.
En total serán 8 los concejales que tendrán dedicación completa al consistorio además del alcalde, Josep Vicent Garcia i Tamarit, que tendrá una dedicación parcial del 75%. El munícipe señaló ayer que la Pobla de Vallbona «es el municipio más grande de la comarca de Camp de Turia y necesita un equipo potente capaz de gestionar con eficacia el consistorio».
El ayuntamiento de la Pobla cuenta con una plantilla de 200 trabajadores y con un presupuesto superior a los 18 millones de euros. Según señaló el equipo de gobierno en un comunicado, en los últimos cuatro años el consistorio ha conseguido un superávit de 6 millones de euros con un equipo de gobierno que ha estado supervisando la gestión y el gasto en cada una de las áreas, en la mayoría de los casos con una dedicación completa de concejales no liberados y que no han sido retribuidos por su trabajo. El alcalde sostuvo que «se ha demostrado una gestión eficaz y ahora lo que hace falta es retribuir a las personas por el trabajo que hacen».
De esta manera en esta legislatura el salario de los concejales pasará de los 31.000 a 36.000 euros anuales, un aumento que equiparará los sueldos al de localidades como Llíria y quedará mucho por bajo de otros municipios como Bétera con 37.500, Riba-roja con unos salarios que rondan los 39.000 y la Eliana con 43.200 euros, todos ellos con menos habitantes que la Pobla.
En este sentido Garcia aseguró que los políticos «tienen derecho a cobrar por el trabajo que realizan y que a pesar de este aumento, el salario de los concejales continuará por bajo del de muchos técnicos que dependen de ellos a pesar de la importancia de las decisiones que toman».
