Mantiene al trabajador en su puesto de trabajo, ha solicitado la instalación de un segundo cambiador para el aseo de hombres y lamenta lo ocurrido porque "no hubiera habido problema alguno si la dirección del restaurante o la gerencia hubiéramos tenido conocimiento de lo que pasaba y nuestro trabajador no hubiera tomado la decisión de forma unilateral. Aún así, ni está despedido ni tenemos intención de hacerlo porque ha sido todo un despropósito".

Así responde el restaurante La Bicicleta de Nàquera tras la denuncia presentada por la Unión de Consumidores por impedir a un padre ir al baño de mujeres, donde estaba situado el cambiador de bebés, a cambiar a su hijo. Desde el restaurante piden disculpas por lo que considera un "fallo humano en términos de comunicación", por lo que "se han tomado medidas correctoras por la inadecuada respuesta del empleado. Sin embargo, estas medidas no pasan por el despido del empleado, sino por la "creación de protocolos para mejorar la atención a los clientes, especialmente en términos de igualdad. Así mismo se instalará otro cambiador idéntico en el cambiador de caballeros para que no se pueda dar una circunstancia similar".

"La empresa instaló el cambiador de bebés en el baño de señoras únicamente por un motivo de dimensiones, al ser este mas grande que el de hombres. La empresa normalmente facilita otro espacio de uso privado para cualquier cliente que lo necesite. En numerosas ocasiones se ha utilizado por padres o madres para desarrollar cualquier necesidad de cambio, lactancia o para dormir a sus bebés. La empresa en ningún momento considera que deba ser la madre la que cambie al bebé y actuó de forma prudente debido a la posible queja de otras mujeres que se pudiesen sentir incómodas por la presencia de un varón en el espacio para mujeres", explican desde el restaurante tras recalcar que "no existe ninguna normativa respecto a la colocación de cambiadores en los baños".

El restaurante lamenta lo ocurrido y las críticas posteriores porque "nuestro establecimiento es lugar de encuentro de numerosas familias, somos padres y madres y facilitamos todo lo que nosotros mismos necesitamos o hemos podido necesitar. Pedimos disculpas por el daño emocional causado y actuaremos con inmediatez para reparar el daño y para crear un protocolo eficaz de igualdad en estos escenario".

Desde la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas aseguran que «ya existe una normativa que dice que lo que ha ocurrido no es posible. Aún así desde la nueva ley de Igualdad prevista para esta legislatura se va a trabajar desde la igualdda de género y la corresponsabilidad».

Desde las asociaciones feministas que agrupa la Federació de Dones Progressistes, sin embargo, califican de «despropósito lo ocurrido» tanto «por parte del trabajador que no deja entrar al padre donde está el cambiador, como del padre afectado que se enroca en ser él y no la madre el que cambie al bebé. Esto es un despropósito de principio a fin y parece fuera de contexto». Respecto a la nueva ley de Igualdad afirman que «debe poner el foco en las discriminaciones, en el empleo y en la violencia» aunque afirman que «de momento sabemos que preparan la ley pero nadie nos ha pedido opinión».