El Consorcio Valencia Interior (CVI) se reunió ayer con los representantes de los municipios de la Mancomunitat de Camp de Túria para tratar las cuestiones relacionadas con la gestión de residuos para 2020. En concreto, se trató la hoja de ruta de la recogida selectiva de los biorresiduos, cuestión obligatoria a la hora de cumplir con los objetivos que marca el Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana que indica que se debe reciclar el 50% de los residuos domésticos en 2020.

Para alcanzar esta cifra, el presidente del ente supramunicipal y alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, señaló que es imprescindible «una planificación ordenada de la gestión de los residuos en vuestros Planes Locales de Residuos». Añadió que con la correcta gestión de los restos de poda y la introducción de la gestión separada de la materia orgánica «se puede llegar a esta cifra de una manera muy eficiente».

En la reunión también se abordó la problemática que tienen los municipios en lo relativo a la recogida separada de envases ligeros y papel-cartón, cuya recogida es insuficiente en parte, debido a los desplomes del precio del cartón. Se plantearon varias alternativas para solucionar esta situación lo antes posible, de manera que se atiendan a las necesidades de cada localidad.