El Consorcio Valencia Interior continúa impulsando las acciones de educación ambiental con la realización de talleres y con las acciones que desarrolla en el aula ambiental de la Planta de Llíria. En 2019, un total de 1.655 personas acudieron a esta instalación para conocer de primera mano el trabajo que realizan los operarios en la propia planta, así como el recorrido de los residuos desde que llegan.

Además, el equipo de educación ambiental enseña a las personas visitantes a cuidar el medio ambiente con pequeños gestos con los que se pueden conseguir grandes resultados. Como cifra global, un total de 15.910 personas han acudido a la planta de Llíria desde que se iniciaron las visitas en el año 2013.

Estas visitas están al alcance de los centros escolares, los colectivos sociales o al personal técnico del ámbito del Consorcio de alguno de los 61 municipios de las cinco comarcas que pertenecen a esta entidad supramunicipal. En el caso de los escolares, se recomienda la asistencia a partir de cuarto de primaria. Durante la actividad, el alumnado conocerá de forma amena qué ocurre con los residuos desde que llegan a la instalación, a través de juegos y dinámicas en las que los niños y niñas tienen un papel activo.

En el caso de las asociaciones y entidades, los visitantes conocen qué ocurre con los residuos después de depositarlos en el contenedor correspondiente. Además, conocen de primera mano los principales aspectos de la gestión del Consorcio y los beneficios que aporta la planta de tratamiento de residuos. A los técnicos que visitan la instalación se les muestra una visión diferente y se les explica el funcionamiento técnico de la planta y las características de la maquinaria empleada.

El desplazamiento a las instalaciones es gratuito para los visitantes del ámbito del CVI, ya que el ente sufraga el autobús para que tanto niños y niñas como personas mayores puedan conocer la planta. Además, el Consorcio ha diseñado y producido nuevos paneles con nuevos contenidos sobre cambio climático, desperdicio alimentario y biorresiduos, entre otros aspectos, que muestran una nueva imagen y nuevas dinámicas a las personas que acudan a la instalación. El equipo de educación ambiental ha planteado también nuevos juegos y actividades para enseñar de manera divertida que estarán disponibles en el segundo trimestre del año.