Chelva tiene una nueva oportunidad para reparar la memoria democrática. La Conselleria de Participación y Calidad Democrática ha concedido a la Asociación la Gavilla Verde de ola capital serrana una subvención por valor de 22.614 euros para verificar y localizar las tres fosas comunes que existen en Chelva, que se llevará a cabo en 2021, y la posterior exhumación de las víctimas de la represión franquista en esta zona, que se prevé ejecutar durante el ejercicio de 2022.
Así, la Gavilla Verde se interesó por las reclamaciones de los familiares y juntos comenzaron a tramitar estas subvenciones. «Los familiares nos pidieron que les ayudáramos en la labor de recuperarlas y así poder enterrarlas con la dignidad que merece cualquSier ser humano», señaló el presidente de la asocSiación, José Gorgues.
Así, la asociación ha formado un equipo multidisciplinar para coordinar los trabajos con forenses, historiadores y arqueólogos de Chelva, además de con la colaboración de la revista la Fénix Troyana y el ayuntamiento, que cuenta con otra subvención de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias y Arqueoantro para iniciar los trabajos de una de las fosas, por lo que habrá colaboración entre los dos grupos de trabajo, según expuso Gorgues.
El equipo estará liderado, entre otros, por el arqueólogo Juanjo Ruiz, con amplia experiencia en Chelva y en el conjunto de La Serranía. En declaraciones a este diario, explicó que esta subvención es un escalón más dentro de la investigación que se inició en 2016, cuando un equipo de arqueólogos de Chelva detectó unas posibles fosas comunes donde estarían los represaliados de la posguerra, de los cuales había escasa información excepto la transmitida popularmente.
A través de una subvención de la Diputación de València se pudo utilizar el georradar a fin de comprobar que efectivamente existían, y así fue. Ahora, con la subvención recibida del Consell se corroborará y se localizarán de forma exacta para proceder a su posterior exhumación.
Según Ruiz, en los próximos meses «tenemos que abrir y comprobar si es cierto que están ahí los cuerpos de los represaliados o si por el contrario no hay nada», algo que hasta que no se produzca la excavación no puede saberse al 100 %, ya que en muchos casos los cuerpos fueron exhumados poco después de ser fusilados por los familiares y trasladados a otros cementerios para darles sepultura, por lo que en estos momentos el equipo no conoce qué puede haber en ellas.
Ruiz contará con la participación en los trabajos de los arqueólogos Llorenç Alapont y Ricardo Cristal, además del antropólogo Francisco Fababug.
Víctimas de Chelva y Alpuente
El equipo cuenta con la relación de víctimas fusiladas en distintos días de 1939 a diversos cargos y militantes republicanos de La Serranía, la mayoría de ellos de Chelva pero también de municipios vecinos como Alpuente. La primera ronda de fusilamientos se produjo el 25 de abril y el siguiente fue el 24 de mayo y el 22 de julio. Un año después, el 9 de mayo de 1940, se mató a un hombre más.
A todos ellos, una vez se localicen los restos, se les practicará una muestra de ADN con la que cotejar en familiares directos vivos. Entre los fusilados se encuentran Manuel Muñoz, Antonio Ganosa, Ángel Laguarda, José Roger, Juan Egea, Luís Mozos, Facundo Soler, Miguel Piera o Juan Álvarez Madrid, entre otros. En total, 23 hombres vecinos de La Serranía.
Las tres fosas se ubican entre el cementerio y la plaza de toros según los análisis de georradar practicados y las entrevistas realizadas para presentar el proyecto.
