Llíria y Paterna envían material ortopédico al pueblo saharaui
Más de 1.000 personas víctimas de explosiones de minas antipersonas se han beneficiado | Logran reunir 15 sillas de ruedas, 20 bastones y tensiómetros
Araceli Galiano
La Asociación Saharaui de Víctimas de Minas (ASAVIM) ha finalizado este mes de diciembre el proyecto "Salut i Cistelles" de recogida y envío de material imprescindible para familias en campamentos que han sido víctimas de explosiones en minas antipersonas. La iniciativa ha estado financiada por parte del Ayuntamiento de Llíria y también ha participado la ONG Sàhara Lliure de Paterna.
En total más de 1.000 personas han beneficiado sus condiciones en este desierto de Argelia. El proyecto ha costado un total de 10.000 euros. Por una parte se ha obtenido material ortopédico entre los que se encuentran 15 sillas de ruedas (con y sin orinales), 20 bastones, 70 cajas higiénicas y 4 tensiómetros. También se ha mejorado la alimentación con la adquisición de varias cestas nutricionales con huevos, leche o arroz.
"Llíria tiene una sensibilización especial con el tema, porque el Sahara es un pueblo ocupado por marroquíes", asegura Loles Ripoll, presidenta de Sàhara Lliure Paterna. Después de tres meses de trabajo desde que se firmara el convenio, por fin, consiguen su objetivo: mejorar la calidad de vida de la gente que se encuentra en refugios saharauis.
Un mercado local beneficiado
En concreto, todos los productos de los que se han visto beneficiados proceden de mercado local de tiendas de valiatos o "wilayas", es decir, la subdivisión administrativa que tienen algunos países musulmanes. De esta manera, la población del propio territorio gana y se fomenta el empleo. Además, la organización Sàhara Lliure ha aportado con el envío de pañales y glucómetros.
"Es importante que se conciencie en colegios sobre la problemática para que puedan sentir afectividad y solidaridad"
Gracias a la unión de diversas asociaciones, los diferentes municipios pueden conseguir subvenciones y así ayudar al pueblo saharaui. "En este caso, una compañera nos comentó que Llíria estaba interesada en colaborar con nuestra organización", expresa la dirigente. Además todo tiene que estar justificado con dinero público: "Estamos a nada de presentar la memoria de este año y preparando ya la siguiente", afirma la presidenta.
Una tramitación rápida
Sin embargo, hay poco tiempo: "Tenemos que tramitar toda la documentación con el territorio al que se ayuda de manera veloz y habiendo pagado todo el material en pocas semanas", explica Ripoll. En este caso, la fecha límite para presentar "Salut i Cistelles" es hasta este jueves, 15 de diciembre.
Ya el año pasado, la localidad realizó otro plan parecido pero esta vez dedicado al deporte con una formación continuada de la población infantil saharaui a través del baloncesto en la "wilaya" de Bojador.
Ripoll lleva 25 años al frente dedicada a la causa saharaui: "Mi vocación empezó en el verano del 96, cuando acogí junto a mi familia a un niño", afirma. Ha dedicado parte de su vida a la enfermería y también fue concejala por Compromís en Paterna. Ha trabajado en el territorio afectado más de 30 veces y considera que tiene una relación íntima y cercana.
"Es importante que se conciencie en colegios sobre el asunto y que desde muy pequeños entiendan los derechos humanos que se vulneran en este territorio, para que así puedan sentir afectividad y demostrar solidaridad", apunta la presidenta de Sàhara Lliure.
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