Riba-roja consolidará el yacimiento València la Vella como el primer parque arqueológico de València

El Plan Director es una declaración de intenciones de la apuesta firme de una institución por impulsar o preservar una actividad o enclave. Si hace unos días Riba-roja de Túria presentó el Plan Director de Destino Turístico Inteligente, para convertirse paso a paso en un lugar de visita obligatoria, ayer hizo lo propio con el yacimiento arqueológico de València la Vella. El consistorio ha impulsado y financiado la redacción de esta guía para consolidar este espacio y convertirlo en el primer parque arqueológico de la provincia. Por el camino se fomentará la investigación de este lugar del que aún hay más preguntas que respuestas y se promoverá su divulgación, no solo en el municipio si no en toda la provincia, ya que esta ciudad visigoda del siglo VI goza de una parada de metro a escasos cinco minutos de las excavaciones.

La presentación esta mañana del Plan Director del yacimiento visigodo de València la Vella establece las líneas de trabajo en diferentes niveles interelacionados: científico, museográfico, educativo, arquitectónico y urbanístico, y marca las directrices científicas y museográficas para la puesta en valor del yacimiento. Además, ha servido para hacer un repaso de lo que se ha hecho hasta ahora así como de los próximos pasos a dar.

Los trabajos se iniciaron en 2016 tras la firme voluntad política de encontrar en esta urbe escondida la identidad de Riba-roja, ciudad fundamental durante la etapa visigoda de España. Para explicar todos estos pasos compareció el investigador y director del proyecto Josep Maria Macias, miembro del Instituto Catalán de Arqueología Clásica que participado en las excavaciones llevadas a cabo hasta ahora, un total de seis gracias a fondos de varias instituciones como la Diputación de València y la Generalitat.

Ahí radica una de las claves: "Los planes directores suelen hacerse al final de una intervención y en València la Vella lo hemos hecho al inicio y nos sirve como herramienta para guiar el proyecto y buscar financiación supramunicipal", señaló Macías. Se debe combinar con otros planes para que todo tenga un sentido global: con el de Turismo, pero también con el plan especial de Urbanismo, ya que el yacimiento se encuentra en un lugar rodeado de viviendas, y con el del Parque Natural del Túria, en cuya inmediación se encontraba esta ciudad visigoda.

Macias insistió en que Valencia la Vella es un tesoro que aún está por descubrir pero que en cada excavación ratifica la potencia que fue. "Tiene inerés histórico, patrimonial y natural, y es el único parque arqueológico potencial que tiene una estación de metro a cinco minutos y se encuentra a veinte minutos de una gran capital", dijo Macías. De ahí la importancia de fijar las fases de desarrollo de este yacimiento que, según explicó, comienza con la investigación para pasar al análisis de criterios de intervención arqueológica, de conservación y de explotación y finalmente la programación y finalidad de este yacimiento.

En este sentido, el académico explicó que la zona visitable ya adecuada podría duplicarse en los próximos cuatro años, siempre con el reto de obtener financiación para poder seguir investigando y destapando la estructura urbanística oculta entre sedimentos y vegetación. "Valencia la Vella fue un asentamiento que puede explicarnos cómo fueron las ciudades premedievales, que estaban a mitad caballo entre el Imperio Romano y la Edad Media, con estructuras militares como la gran muralla que rodea este yacimiento", señaló el investigador.

El trabajo se ha desarrollado tanto por Macías como por Cristina Silvestre, Albert Ribera y Tirso Ávila, y tanto la concejala de Turismo y Patrimonio, Esther Gómez, como el alcalde, Robert Raga, alabaron el trabajo realizado por los cuatro profesionales.

"Es nuestro deber saber qué hemos sido"

El alcalde de Riba-roja, Robert Raga, se reafirmó en el compromiso de seguir investigando y promoviendo las excavaciones en València la Vella para conocer "nuestra historia como pueblo, aprender a través de la investigación y la ciencia lo que hemos sido a lo largo de los siglos y milenios". El alcalde destacó el punto de referencia que es Riba-roja en la cultura visigoda ya que en el término municipal existen dos yacimientos, Valencia la Vella y Pla de Nadal, en los que se ha trabajado para poner en valor.

"En Valencia la Vella cada año se descubren nuevos restos como monedas, un horno de vidrio o partes de la muralla que van cambiando nuestra historia", dijo el primer edil.

La compra de la última parcela

Otro de los retos a medio plazo a los que se enfrenta el ayuntamiento es a comprar la última parcela de un particular donde se encuentra este yacimiento y que no se ha podido excavar precisamente por ser un terreno privado. Es la número 13 y el consistorio ya se encuentra en negociaciones para adquirirla y poder incluirla dentro de las actuaciones que se llevan a cabo desde hace siete años. Cabe recordar que ya adquirió uno de los chalés que linda con este yacimiento y que va a convertirse en un centro de recepción e interpretación de Valencia la Vella.