
Loriguilla apuesta por la prevención y la resiliencia tras la dana
La alcaldesa defiende la necesidad de sistemas de alerta independientes y planes de reconstrucción eficientes

Montserrat Cervera. / Miguel Angel Montesinos
J.M.B.
«La seguridad y la atención inmediata a los vecinos y vecinas es el primer reto que afronta cualquier alcalde o alcaldesa tras una catástrofe como la dana». Así lo defendió Montserrat Cervera, alcaldesa de Loriguilla, durante su intervención en la mesa de alcaldes del III Foro del Municipalismo de Levante-EMV, centrada en los retos para la reconstrucción tras la dana del pasado 29 de octubre.
Cervera recordó cómo su equipo activó los protocolos de prevención ya la noche anterior al episodio meteorológico extremo. «La primera llamada que hice como alcaldesa fue a la directora del colegio, a las 8:40 horas, para estar en contacto permanente por si debíamos suspender las clases», relató. Esa misma mañana se decidió cerrar tanto la guardería como el colegio, y enviar al personal municipal a casa.
Por la tarde, y ante la magnitud del episodio, el consistorio movilizó a Policía Local y Protección Civil para recorrer el municipio y alertar a la ciudadanía. Poco después, Loriguilla se quedó incomunicada, sin electricidad ni agua. «La primera decisión fue clara: gestionar los puntos clave para restablecer los servicios básicos y asegurar el abastecimiento de agua, electricidad, gas, telecomunicaciones y alimentos», explicó Cervera, quien destacó que gracias a la coordinación con Iberdrola e Hidrocantábrico se logró suministrar generadores con rapidez, permitiendo recuperar la luz antes que otros municipios.
La alcaldesa también pidió que se implanten sistemas de aviso y alerta autónomos, independientes del suministro eléctrico. «La desinformación o la no-información desespera», advirtió.
En cuanto a la reconstrucción, subrayó que aunque «no se pueden recuperar décadas en días, sí se puede trazar un plan eficiente con ayuda de fondos autonómicos, estatales o europeos». Cervera reivindicó además el espíritu resiliente de su municipio: «Loriguilla ya sabe lo que es empezar de cero. La fuerza de un pueblo está en su gente».
Respecto a las zonas inundables, avanzó que ya se trabaja en ampliar el barranco de Pozalet, instalar vallas de hormigón, mejorar puentes e incrementar las zonas verdes absorbentes. «Debemos replantearnos todo para no repetir errores».
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