Las intensas lluvias que se vienen registrando a lo largo del otoño están propiciando la recuperación de los manantiales de aguas superficiales. Así las cosas, el río Magro está recargando dos grandes estanques que están ubicados cerca de la pedanía requenense del Pontón, que se utilizan para el riego agrícola. El agua también vuelve a fluir por fuentes que estaban secas desde hace mucho tiempo.

En Chera "poco a poco se recupera el Chorrero de la Garita de la sequía del verano. Con las aguas que se avecinan esperamos que pronto alcancé su mayor esplendor", afirmó el alcalde de la población, Alejandro Portero.

El agua vuelve a correr por ramblas y humedales y empieza a aparecer por los rebosaderos de los manantiales.

Los municipios en los que más se nota la recuperación de los acuíferos son Chera, Siete Aguas y la parte oriental de Requena.

Los intensos temporales también han animado a los buscadores de hongos rebollones y en los establecimientos de Requena- Utiel se puede adquirir este rico manjar a unos precios asequibles.