Una fuga de agua en el casco histórico de Requena ha destrozado la Bodega Honda de Vera de Estenas, en plena calle San Nicolás de la villa.

El motivo de la fuga se desconoce pero lo cierto es que buena parte de las tinajas históricas del local han quedado destrozadas y la cueva completamente inundada.

El lunes, la familia Martínez-Roda, propietaria de estas bodegas, presentó un escrito en el ayuntamiento para denunciar lo que había sucedido: durante el fin de semana se hundió la cueva, con un derrumbe, debido a la constante filtración que estaba sucediendo desde hacía dos meses.

Ya entonces, los gestores de la bodega contactaron con Egevasa para avisar y averiguar el origen. La entidad no llegó a resolver la duda y según han declarado fuentes implicadas, "hasta que no se hundió la bodega y se llevó el asunto al ayuntamiento no se ha hecho nada".

De las 33 tinajas que hay en esta bodega, todas ellas históricas, ocho se han visto afectadas, todas rotas. Ahora bien, al parecer podrían tener reparación, como el derrumbe de la cueva, que también puede ser subsanado. Para ello, consultarán con el ayuntamiento qué posibilidades hay de que ellos se encarguen de la reparación ya que la fuga, ahora sí, es de agua potable de una de las tuberías que cruzan la villa de Requena.

El barrio medieval está lleno de este tipo de bodegas excavadas en la roca desde hace siglos y esta, la Bodega Honda, esta en el frente sur, en pendiente, hacia donde se dirige toda el agua del subsuelo lo que ha provocado que históricamente el deterioro del subsuelo y la cimentación de esa zona por las filtraciones de agua en la roca calcárea.

En esta ocasión ha sido una filtración derivada de una tubería de agua potable la que ha causado el desastre en este emplazamiento donde se conservan tinajas del siglo XVIII así como elementos tradicionales para la elaboración del vino. Estas bodegas fueron recuperadas y abiertas en los años 60 por iniciativa privada y ahora se dedican a actividades de enoturismo.