Rubén García, el jugador setabense del Levante, ya está inmerso en su primer campus, que empezó en Xàtiva el pasado lunes y que durará hasta el sábado. Ayer, tras acabar exhausto del entrenamiento con los niños, atendió a este periódico para valorar cómo está siendo la experiencia.
Rubén muestra la ilusión que le provoca estar al frente de este proyecto, cuando precisamente, hace unos pocos años, era él quién disfrutaba de estos eventos desde dentro, y no como organizador. Ahora que se ha convertido en un ídolo para los más pequeños y ha recibido la admiración de su ciudad, Rubén está creando escuela. «Lo principal es que los niños me vean jugar con ellos, correr con ellos, reírme con ellos... ¿qué mínimo que compartir mi tiempo con ellos? Soy uno más de su equipo», asegura.
Son un total de 41 niños los que están disfrutando esta semana del Campus Rubén García, «creo que para ser el primero, es una muy buena cifra», opina Rubén. Lo más importante es «que hayan disfrutado. Que tengan ganas de volver al año que viene, ya no por el nombre, sino porque estén satisfechos de haber estado aquí», explica el jugador. Rubén, además, aconseja a los jugadores en su futuro como futbolistas, diciéndoles «que hagan caso a sus padres porque son el mayor apoyo, que traten al fútbol como a un hobby, y si más adelante llegan a ser profesionales, pues que lo disfruten y se lo tomen muy enserio».
Enfrentamiento contra Albelda
Para hoy, el campus tiene prevista una visita al Ciutat de València, con tal de conocer cada uno de los recovecos de la que ya es la «segunda casa» del setabense, y mañana habrá una visita de otro futbolista de élite, que según nos apuntó el propio jugador, casi con total seguridad se tratará del jugador del Valencia e internacional sub-21 Juan Bernat. El viernes será el turno del enfrentamiento contra el campus de David Albelda, del que también se espera su presencia, y el sábado será la clausura, en la que se entregarán los diplomas de participación de la primera edición de este campus que, como el propio levantinista expresa, ojalá se consolide con los años, cultivando la humildad que es «el valor más importante para todo futbolista», según apuntaba ayer Rubén.
