Montesa blinda la Serra Grossa en el PGOU para intentar frenar la ampliación de la cantera

El Ayuntamiento de Montesa ha sometido a exposición pública la versión preliminar de su Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el instrumento que regirá el ordenamiento urbanístico de la localidad a medio plazo, actualizando las obsoletas normas subsidiarias vigentes desde 1988. El documento blinda la Serra Grossa y califica como suelo no urbanizable de protección forestal y paisajística los terrenos donde se sitúa la cantera de áridos emplazada a los pies del paraje, a tiempo que define como una «prioridad» la restauración del suelo que ocupa la explotación.

El PGOU provisional precisa que la citada cantera «representa una profunda alteración de las formas y la biodiversidad del paisaje, con impactos ambientales graves y una elevada visibilidad desde todo el municipio». El Plan advierte de la «elevada exposición visual» en la fachada norte de la Serra Grossa y el Barranco de la Fos y sostiene que la mina causa «un gran impacto paisajístico» percibido por los ciudadanos de Montesa «como uno de los problemas fundamentales a nivel ambiental y paisajístico del término», tal como concluyó el plan de participación pública que sentó las bases del PGOU.

Más de un año sin actividad

La cantera «Áridos Mangay» permanece temporalmente sin actividad desde hace más de un año y ha funcionado de manera intermitente con el estallido de la crisis. El propósito perseguido por el consistorio con la ordenación propuesta es el de impedir la ampliación del sector excavado en las proximidades de la desembocadura del Barranco de la Fos al Río Cànyoles. La corporación municipal ya informó en noviembre de 2009 en contra del proyecto impulsado por Corporación F. Turia, SA, que pretende establecer en el municipio una gran cantera que absorbería la actual y que según el PGOU «afectaría en gran medida al paraje natural del Barranco de la Fos».

El regidor de Ordenación, Juan García, reitera el «impacto ambiental» de la mina y subraya que la última palabra sobre la ampliación corresponde a la Conselleria de Medio Ambiente. Por lo pronto, el proyecto se encuentra en suspenso, probablemente a la espera de tiempos mejores, aunque García advierte de que podría aprobarse en cualquier momento. La explotación propuesta, de la que se pretende extraer piedra ornamental, cuadruplicaría la superficie autorizada inicialmente en 2006, tendría una vida útil de 42 años y afectaría a 37 ha de suelo forestal. El PGOU recuerda que la empresa gestora de la mina sobrepasó los límites autorizados por las autoridades afectando a casi 6 ha del monte La Umbría que tuvieron que ser restaurados. También establece una protección paisajística dea los terrenos adyacentes al cordel «de Ayelo a Enguera» en su recorrido por la Serra Grossa en toda su cuenca visual. La vía pecuaria resultaría ocupada con la ampliación.

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