Destruyendo el patrimonio en la Plaça de la Bassa de Xàtiva

En el final del paseo de la Albereda de Xàtiva, ya entrando en la Plaça de la Bassa, se ha colgado de la bonita fachada modernista de una antigua casa un cartel que anuncia la próxima construcción de un vulgar edificio de seis alturas para viviendas de lujo. En la bella y emblemática plaza ya hay clavados como estacas dos feos monstruos de edificios del desarrollismo ignorante y malentendido de finales del siglo XX, y otros más ya llegando hasta la plaza del Espanyoleto, sin contar el desangelado diseño del aparcamiento mutilando el espacio.

Parece que nada se ha aprendido de un modelo urbanístico que ha explotado trayendo una crisis brutal y que ha perjudicado irremediablemente las oportunidades de Xàtiva, desde el punto de vista del turismo cultural, como motor económico y generador de empleo. Sin todas las aberraciones urbanísticas hechas y consentidas en la Albereda y otros puntos del centro histórico tal vez la ciudad antigua hubiera podido ser Patrimonio de la Humanidad.

Si nadie lo remedia, la pequeña coqueta y antigua fachada modernista de colores y azulejos, en el entorno del conjunto histórico-artístico de Xàtiva, Bien de Interés Cultural, sucumbirá a la piqueta, sin ni siquiera la posibilidad de integrarse como tal en el nuevo y mediocre edificio. Una prueba más del desinterés y desprecio del gobierno municipal por el valioso legado cultural de Xàtiva, que ni conocen, ni entienden, y también de la indiferencia de una sociedad setabense, en estado vegetativo, a años luz de aquella que sustentaba la segunda ciudad del Reino de Valencia. Hagamos pues fotos —como las del antiguo cine teatro Salón Setabense que tenía la plaza— para recordar y publicar un libro de aquí unos años, de esos que se agotan y tanto gustan a los setabenses. ¡Qué pena!

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