La Societat de Festers del Santíssim Crist de l'Agonia de Ontinyent ha recobrado la normalidad tras hacer efectivos los nombramientos del cronista de la entidad, el director del Museu Fester y del asesor musical. José Luis Azorín, Rafael Torró y Enrique Orquín eran elegidos por unanimidad en la primera junta de gobierno de la nueva directiva de Festers, que preside José Rafael Sanchis. La junta se celebró el pasado viernes con el nuevo equipo de gobierno y los 24 representantes de las comparsas de la ciudad.
El festero chano José Luis Azorín Cambra será el nuevo cronista de la Societat de Festers. El ontinyentí se inició como festero en la comparsa Llauradors y ahora está en Chanos, donde ha sido miembro de la junta de gobierno, de la junta de la capitanía (2001) y fue Primer Tro en 2002. Ha formado parte de la junta de la Societat de Festers bajo la presidencia de Míchel Aliaga y es colaborador habitual de varios medios en programas festivos. También ha formado parte de las junta de fiestas de la Puríssima, bajo las presidencias de Enrique Gilabert y Juan Vaello.
El nuevo director del Museu Fester es el mozárabe Rafael Torró Ferrero, artista dedicado a la pintura y escultura. Algunas de sus obras están en la Societat de Festers y el Museu Fester, junto a otras de su padre, Rafael Torró Abad. Ha diseñado vestidos y boatos para cargos de la fiesta y fue el autor de la escultura oficial del 150 aniversario de los Moros i Cristians de Ontinyent y de la escultura del I Congrés d'Ambaixades i Ambaixadors. Torró formó parte de la comparsa Moros Marinos y ahora de Mossàrabs. Ha participado en concursos de carteles, de temática festera, donde ha conseguido diversos premios.
Por su parte, Enrique Orquín Aleixandre ha sido designado asesor musical de Festers. Titulado en contrabajo y dolçaina, estudia actualmente el grado profesional de tuba y grado superior de dirección de coro. Fue festero de Mossàrabs, Arquers y ahora de la comparsa Llauradors. Orquín era el asesor musical de Festers en la anterior directiva, de Míchel Aliaga, y fue uno de los siete dirigentes que dimitieron por discrepancias con el entonces presidente, que estuvo en el cargo tres meses.
La Societat de Festers recobra la normalidad tras unos meses convulsa, primero por la dimisión en bloque de 7 de los 11 integrantes de la junta directiva, y después del presidente Aliaga. La elección de José Rafael Sanchis como presidente iniciaba la reconducción de Festers, completada ahora con la elección de los tres cargos.
