Hace casi diez años que Paco Roca no gana el primer premio absoluto de las fallas infantiles de Xàtiva (el último, en 2007). Y Manuel Blanco Climent, hijo de Manuel Blanco, no se corona en la especialidad desde 2013. Sin embargo, ambos —totalmente en activo— continúan siendo los dos artesanos falleros más laureados del cadafal infantil. Roca, que ganó por vez primera hace ya 35 años, en 1981 (Espanyoleto) suma nueve coronas. Blanco, cuya última racha fue la de tres años seguidos ganando con Selgas-Tovar (2) y Murta-Maravall, lidera el historial, con doce. El primero de sus galardones se remonta ya nada menos que al año 1985. Si se exceptúa un primer premio en los albores de su carrera, en 1992, ni Xavier Herrero ni Blanco padre fueron nunca especialistas en infantiles. Quien lo fue —además, en exclusiva— es Blanco hijo. Hasta que dio el salto a los grandes volúmenes, en 2008. El caso más atípico, por tanto, es el de Roca: ha compatibilizado fallas con aspiraciones tanto grandes como infantiles.
¿Relevo generacional?
Sin embargo, desde 2014 que ninguno de ellos hace hueco en la vitrina con un primero de especial. El joven Xavier Ureña, por un lado, y Josep Almiñana (dos años seguidos ya ganando) parecen haberles relevado. Otro especialista de infantiles pero en exclusiva con Abú Masaifa, Josep Angulo, no gana desde 2010.
