El Museo Arqueológico de Ontinyent y la Vall d'Albaida, Maova, inauguraba el lunes la exposición Eixemplart, un mundo sin abejas, una muestra colectiva de arte contemporáneo que utiliza como hilo conductor la colmena de madera. Producida por el Museo Valenciano de la Miel de Montroi en colaboración con el Museo Valenciano de Etnología y la Diputación de València, la exposición transforma estas piezas en arte a partir de la pregunta: «¿Si desaparecieran las abejas, qué uso tendrían las colmenas?». Trece artistas valencianos han manipulado a su gusto el interior y el exterior de estas cajas, utilizando efectos sonoros y lumínicos, realizando esculturas y pinturas diversas o aplicando diferentes técnicas artísticas como el grabado, la serigrafía o el denominado arte textil, entre otras.
Participan la escultora Inma Abarca, quien ha trabajado la cera; Jordi Albinyana y Maria Marchirant la pintura; Ana Martínez Morlanes el papel; Francisco Pérez el vidrio; Marisa Perales Trescolí el grabado y la acuarela; Araceli Carrión las telas y el hilo de coser; Rafa Ferri el modelado; Josep Moltó el tinte, Arnau Pascual Ledesma la estampación; Francesc Piera el reciclaje y Teresa Queralt la tipografía, según han explicado desde el Ayuntamiento de Ontinyent.
El objetivo de la exposición es hacer llegar un mensaje «directo e inquietante a la sociedad: la polinización de las flores es vital para nuestra alimentación y para la biodiversidad, pero las abejas, unas de las principales encargadas de esta misión, están desapareciendo», alertan. «Las causas de este exterminio las encontramos en la agricultura industrial y el uso de plaguicidas tóxicos». La muestra destaca la urgencia y la necesidad de cambiar el modelo de la agricultura industrial por una agricultura ecológica, recalcan.
Una exposición comprometida
El regidor de Cultura, Àlex Borrell, quien acudía a la inauguración acompañado por el Director del Museo, Agustí Ribera, y de Francesc Piera en representación de los artistas participantes, explicaba que «la exposición ayuda a la sociedad a concienciarse ante un problema tan grave como es la paulatina desaparición de las abejas, insectos de los cuales el ser humano depende indirectamente», subrayó anteayer el regidor.
