Los festeros más pequeños volvieron a invadir ayer las calles de Ontinyent con el color y la diversión a la Entrà Infantil de las Fiestas de Moros y Cristianos de 2016. Niños y niñas acompañados de sus familiares y amigos a bordo de carrozas y a pie han recorrido el itinerario comprendido desde el cruce de la avenida de Daniel Gil con la calle Martínez Valls, hasta los pies del Castell de Festes, pasando por la Glorieta de los Moros y Cristianos, la Plaza de la Concepción, Gomis y Maians y la Plaza Mayor. A medida que han avanzado por el recorrido han ido contagiando de ilusión tanto a espectadores, amigos y familiares, como el resto de miembros de las comparsas que ayer por tarde y por noche vivían su día grande con la Entrà del ejercido cristiano, que comenzó a las seis de la tarde, y la entrada mora, prevista a partir de las diez de la noche. Con esta entrada infantil el colectivo morocristiano de Ontinyent cuida la cantera y fomenta entre los niños una pasión por la fiesta crucial para que, cuando sean adultos, se sientan fuertemente enraizados con esta celebración.