«Hay que desterrar la idea de que cáncer es igual a muerte. Hoy el cáncer se puede curar en probabilidades muy elevadas». Con esta alentadora afirmación comenzó ayer la catedrática de Medicina y jefa de Oncología del Hospital Clínic de Valencia, Anna Lluch, la conferencia magistral en el acto de apertura oficial del curso universitario en Ontinyent. Lluch, de la que el rector Esteban Morcillo afirmó que «he conocido muchos médicos y siempre me sorprende su increíble dedicación a las personas enfermas, para las que la doctora Anna Lluch no tiene horas», acumula una larga trayectoria en el tratamiento del cáncer, por la que ha sido distinguida con la Medalla de la Universitat de València „la más alta distinción de la institución académica„ y con la Alta Distinció de la Generalitat Valenciana, tal como apuntó el rector Morcillo.
La doctora expuso en su conferencia «Creando valor, investigación y desarrollo. Medicina Personalizada del cáncer», los avances producidos en los últimos años con el desarrollo tecnológico en la biología molecular para el tratamiento de la enfermedad. Un tratamiento «personalizado, a la carta», según las características de cada enfermo, remarcó. Lluch inició su conferencia señalando la importancia social del cáncer y el crecimiento de la incidencia de la enfermedad „mayor causa de mortalidad„ desde principios del siglo pasado a la actualidad. Algo atribuible al aumento de la esperanza de vida y a la existencia de factores ambientales que repercuten en el aumento de la incidencia, señaló. «El número de cánceres aumentará con los años» „habrá probabilidades más altas de padecerlo„, pero aseguró también que «la probabilidad de curación es más elevada. Hoy el cáncer no es igual a muerte», dijo. Y apuntó, entre otros, que el de próstata tiene unas posibilidades de curación de hasta el 99%, y más del 80% en el de mama.
La catedrática de Medicina de la UV, jefa del servicio de Oncología y Hematología del Hospital Clínic y miembro del Instituto de Investigación Sanitaria Incliva expuso los avances, entre ellos el diagnóstico precoz, la mejora en medios diagnósticos, mejora en cirugía, nuevos tratamientos basados en el conocimiento de la biología molecular, mejor tratamiento de soporte y mejor radioterapia. Incidió en la importancia del diagnóstico para determinar «tratamientos personalizados», y afirmó que actualmente se aplican «terapias dirigidas, una oncología personalizada, más acertada y específica».
Defensa de la medicina pública
Anna Lluch hizo una defensa de la medicina pública. Aseguró que es «la mejor para tratarse una persona enferma. Es la que está dando ya respuestas y es en la pública donde se han introducido estos avances, avances que ya se aplican». Dijo que la sanidad pública española es «envidiada en Estados Unidos» y afirmó que «no tenemos que perder la medicina pública».
