Después de tres días de complicaciones derivadas de la combinación de nieve, lluvia, tormentas, viento y granizo, el intenso temporal que ha sacudido a la Costera, la Val d'Albaida y la Canal se tomó ayer un descanso que permitió a los municipios más afectados redoblar esfuerzos para devolver la normalidad a las calles y partidas teñidas de blanco.

Las principales carreteras que recorren el territorio se reabrieron al tráfico, mucho más fluido que en días anteriores, aunque hubo que extremar las medidas de precaución. La línea férrea entre Xàtiva y Alcoi quedó restablecida. Sin embargo, cinco carreteras provinciales permanecían todavía cortadas anoche por acumulaciones de nieve o desprendimientos: la CV-584 de Enguera a Benali; la CV-794 de Bocairent a Alcoi; la CV-651 de Moixent a Aielo; la CV-657 de Moixent a Beneixama y la CV-665 en Ontinyent. En la noche del jueves, Cruz Roja auxilió a cerca de 80 vehículos atrapados en la N-344 en la Font de la Figuera y en la A31 en Villena, repartiendo mantas y comida caliente a los afectados.

La gestión del temporal ha sido especialmente complicada en municipios como Bocairent o Fontanars, que el jueves quedaron completamente aislados por la nieve, con acumulaciones de entre 30 y 40 centímetros de espesor en sus calles. Los ayuntamientos se vieron desbordados para atender todas las incidencias y mantener despejados los accesos. En Fontanars, el consistorio hizo ayer un llamamiento para pedir a los vecinos que mantuvieran la calma y evitaran «exponerse a riesgos innecesarios» al desplazarse. La corporación pidió comprensión«por la falta de medios para poder llegar a cada dificultad que iba presentándose». A mediodía de ayer, el alcalde, Julio Biosca, subrayó a este diario las dificultades para restablecer la normalidad. «Aún estamos trabajando con dos máquinas retroexcavadoras para abrir las calles, dejando al menos un carril central despejado para poder circular, pero la acumulación es importante» La carretera de Fontanars a la Font seguía impracticable a esas horas: las quitanieves no podían acceder a ella.

El jueves, los accesos a otras poblaciones fueron «imposibles» durante 12 horas debido al espectacular manto blanco. La falta de recursos ha obligado al consistorio de Fontanars a recurrir a las empresas locales, que han colaborado de forma voluntaria cediendo dos retroexcavadoras para quitar la nieve de las calles. «El ayuntamiento no tiene una brigada municipal. Somos los regidores, el operario, yo y la gente que nos pueda ayudar», recalca Biosca. Aunque en menor medida que el jueves, ayer continuaron las restricciones en los accesos y tuvieron que ser rescatados varios conductores atrapados. Entre Fontanars y Moixent cayeron dos pinos y también se cortó el tráfico. El temporal afectó a muchos árboles.

En Bocairent, donde no se recuerda una nevada tan intensa desde los años 80, ayer trabajaron sin cesar tractores, retroexcavadoras y camiones para borrar los restos del temporal, además de 8 miembros de las brigadas de Divalterra, Policía Local y personal municipal. Aunque la mayor parte del término quedó despejado a la circulación, el dispositivo seguía por la tarde retirando nieve en camiones del núcleo urbano y tratando de dejar transitables todas las vías. La falta de cobertura y los apagones fueron un problema añadido.

En Enguera, tuvo que activarse un dispositivo para despejar el acceso a la pedanía de Navalón, totalmente incomunicada por la nieve, para que un niño pudiera acudir al médico, ayer. Los trabajos en esta y otras partidas de la sierra para restablecer la circulación se prolongaron durante todo el día y continuarán aún hoy, debido a la gran cantidad de nieve acumulada, según indica el alcalde, Óscar Martínez. A las 21 horas del jueves, unos excursionistas de Manises tuvieron que ser rescatados en pleno monte tras quedar atrapados por el temporal. Además, el fuerte viento derribó numerosos árboles.

Más de 100 litros en la Canal

Según los registros de AEMET, en Millares, Bicorp y Navarres se recogieron cerca de 110 litros por metro cuadrado de agua como consecuencia de las lluvias registradas entre las 8 horas del jueves y las 8 horas de ayer viernes. En Ontinyent se alcanzaron los 43 l/m2 y en Xàtiva, los 89,4 l/m2.

Las previsiones meteorológicas del fin de semana han obligado a varios municipios a aplazar las celebraciones de San Antón, como es el caso de Enguera, Anna, Navarrés, Agullent, Aielo o Canals. En esta última localidad, se ha suspendido hasta el próximo fin de semana el regreso de la bandera a la casa consistorial, la bendición de animales de tiro y arrastre y caballerías y la posterior plantà de árboles prevista para mañana. Benigànim también ha aplazado buena parte de los actos festivos en honor a la Beata Inés.

Por otra parte, las clases de ayer volvieron a cancelarse en Fontanars, Aielo, Bocairent, Castelló de Rugat, la Font, Moixent, Ontinyent, Otos, la Pobla del Duc y Salem.