Cientos de personas mostraron ayer sus condolencias al alcalde de Ontinyent y presidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, por el fallecimiento de su padre. Entre ellos, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que acudió al tanatorio de Ontinyent en torno a las 12 del mediodía para dar su pésame personalmente. Miguel Rodríguez Chao tenía 68 años y arrastraba un cáncer desde hace casi dos años. La capilla ardiente quedó instalada en el tanatorio desde las 10 de la mañana. Y a la una hubo una misa concelebrada en ese mismo lugar, con la lectura a cargo del párroco de Benirredrà, familiar del fallecido. El padre de Jorge Rodríguez, jubilado desde hace años, había trabajado en empresas del sector textil.

Además de Puig, ayer acudieron a Ontinyent decenas de cargos como Mercedes Caballero, la nueva secretaria general provincial; Antoni Such, director general de Administración Local; el diputado provincial Pablo Seguí; el secretario comarcal y nuevo gerente de Divalterra, Xavier Simón; el presidente de la Macomunitat de la Vall d'Albaida, Vicent Gomar, entre otros muchos. Alcaldes y concejales de la Vall y la Costera así como representantes del mundo de la empresa o el asociacionismo también mostraron su afecto al primer edil ontinyentino ayer.

El fallecido deja viuda, Xelo; dos hijos, Jorge y Xelo, y un nieto, Jorge, hijo de ésta última y sobrino del alcalde. El primer edil de Ontinyent escribió ayer en su perfil en las redes sociales que «he tenido la suerte de tener un padre que nos ha querido de manera incondicional, que me ha acompañado en todos y cada uno de los momentos importantes de mi vida. Nada volverá a ser lo mismo sin él pero conservaré para siempre su sonrisa, su bondad, su profunda voz y especialmente, su amor», resumió.