Si el 82% de la población cree que existen motivos suficientes para la huelga feminista de mañana no es por casualidad. La brecha salarial, la precariedad y la discriminación de género en el mercado laboral son solo algunas de las poderosas razones que, refrendadas por un conjunto de estadísticas desoladoras, esgrimen las organizaciones comarcales de los sindicatos mayoritarios, CC OO y UGT, para llamar a secundar este jueves los paros parciales de dos horas por turno de trabajo.

Primer conclusión. En el tejido que conforman los 61 municipios de la Costera, la Canal y la Vall d'Albaida, solo un 49,84% de las cotizantes a la Seguridad Social tienen un trabajo a tiempo completo. Si se es hombre, las opciones de firmar un contrato de este tipo crecen exponencialmente: el 79,79% de los trabajadores dados de alta disponen de uno. En la Vall, el porcentaje de empleadas a tiempo completo se desploma al 40,87%, mientras que el de empleados duplica esa cifra (85,5%). En la Canal, hay un 57% de mujeres con trabajos a plena jornada y un 74,7% de hombres. En la Costera, la proporción es de un 51,65% de mujeres y un 79% de varones.

Pero éste no es ni mucho menos el único argumento blandido por las fuerzas sindicales, que también han convocado concentraciones para mañana a las 12 delante de los ayuntamientos de Xàtiva y Ontinyent. Las cifras ponen negro sobre blanco otra realidad: mientras el 16,76% de los hombres cotizantes a la Seguridad Social dispone de un contrato a tiempo parcial, el porcentaje de mujeres bajo esta modalidad se eleva al 37,63% en la Costera. El escenario es similar en la Vall d'Albaida, donde por cada hombre que trabaja a tiempo parcial (el 11,2%) hay tres mujeres dadas de alta en esa forma de empleo (33,97%). O en la Canal, donde se contabilizan un 19,29% de cotizantes hombres con contrato parcial frente a un 34% de mujeres.

No hay que obviar el condicionante que imponen las propias características del territorio, donde los almacenes y cooperativas agrícolas tienen un gran peso en la economía local. Las fluctuantes campañas condicionan la estructura de un mercado laboral que destaca por su temporalidad. En este contexto, surge la inestable figura del personal fijo-discontinuo, más común entre las mujeres que entre los hombres.El 8,96% del total de las afiliadas en la Costera, el 6,97% en la Vall y el 7,65% de la Canal están contratadas bajo está fórmula. En cambio, la proporción de hombres es hasta siete puntos inferior: el 2,56% de los cotizantes de la Costera, el 2,55% de la Vall y el 5,22% de la Canal.

El paro

El último balance mensual de la evolución del desempleo en términos globales tampoco invita al optimismo. Al cierre de febrero, se contabilizaban 150 parados más en las tres comarcas que hace un mes. El número de demandantes se incrementó especialmente en la Canal (un 1,87%), seguida de la Vall d'Albaida (un 1,18%) y, por último, la Costera (un 0,96%). El motivo principal es el final de la temporada de rebajas en los comecios, puesto que el sector servicios es el gran damnificado de la estadística, con 183 nuevos desempleados.

El paro creció en la mayoría de municipios. Es el caso de Xàtiva (8 demandantes más), Canals (52 desempleados más), Ontinyent (47 más), l'Olleria (5 más), Benigànim (8 más), Albaida (5 más), Enguera (6 más) o Navarrés (7 más). Bajó en cambio en Aielo de Malferit (-9) o Bocairent (-5).