Los agricultores de Montesa se han visto sacudidos en las últimas semanas por una escalada de robos en el campo, especialmente en explotaciones de naranjas, que han conducido al ayuntamiento a tomar cartas en el asunto. La problemática fue uno de los puntos centrales del orden del día del Consell Agrari que se celebró el miércoles con representantes del sector, que demandan soluciones para paliar la inseguridad. El consistorio, con medios muy limitados para combatir estos hurtos, explora la forma de poder reforzar su plantilla de policía local con un tercer agente (ahora son solo dos los que se turnan para patrullar las calles y el extenso medio rural). Otra opción sobre la mesa es la contratación de un guarda que haga las funciones de policía rural.
La alcaldesa de la localidad, Analía Juan, abre la puerta a colaborar con otros municipios en materia de seguridad para intensificar estas labores y subraya que también se va a pedir más presencia de la Guardia Civil sobre el terreno. La primera edil señala la urgencia de aumentar efectivos para poder desplegar batidas por el término rural, disuadir a los ladrones y diseñar una base de datos donde se recogerían todas las incidencias notificadas en zonas rurales, a tiempo que se intensificaría el control sobre la basura arrojada a los barrancos y los incendios.
Juan destaca que una de las prioridades del equipo de gobierno ha sido reactivar el Consell de Agrari local, que ya se ha reunido en dos ocasiones desde su puesta en funcionamiento. «Estamos contentos porque se están poniendo en común asuntos en los que es muy importante que vayamos todos a una», apunta la primera edil, que recalca la importancia económica que tiene la agricultura en Montesa. Otra problemática que sufren los trabajadores del campo y que se abordó en el Consell es la plaga de conejos en el campo. Dos agentes forestales detallaron a los afectados las gestiones efectuadas para mitigar sus efectos y explicaron los trámites que han de seguir con los cazadores para solicitar actuaciones en sus cosechas.
El Consell también acordó la promoción de acciones formativas y abordó la posiblidad de crear un asociación local de agricultores para sumar mayores fuerzas y poder captar subvenciones.
