Sindicatos y empresarios han iniciado la negociación del convenio textil para los próximos tres años y, de entrada, las posturas están bastante alejadas. Las centrales reclaman un incremento salarial del 3% con el objetivo de empezar a recuperar poder adquisitivo, bajo el argumento de que el sector ha logrado salir adelante en la crisis económica gracias al esfuerzo en esta materia por parte de los trabajadores. La patronal, por su parte, sólo ofrece la mitad, al considerar la petición desproporcionada.
Sindicatos y empresarios están manteniendo reuniones con el objetivo de negociar el nuevo convenio del sector textil. Según ha explicado el secretario general de Industria de CCOO en las Comarcas Centrales Valencianas, Rafael López, «nuestra intención es la de recuperar lo que hemos perdido en los años de crisis y tener un convenio en condiciones. Los trabajadores hemos hecho un esfuerzo muy grande durante todos estos años para contribuir a salvar el sector, y pensamos que cuando las cosas han empezado a funcionar bien, es hora de que se nos reconozca».
El representante sindical, además, destaca que la crisis en el textil no se ha desarrollado como en el conjunto de sectores productivos, «sino que viene de antes. Hablamos de un sector que ha tenido que afrontar durante mucho tiempo situaciones de complicadas, y los trabajadores, insisto, han hecho un esfuerzo muy grande. Es por lo que pensamos que ha llegado el momento de empezar a recuperar poder adquisitivo, porque se dan las condiciones para que esto sea así», ha subrayado.
Este es el motivo por el que la reivindicación sindical pasa por un incremento salarial del 3%, algo que choca con la contrapropuesta del empresariado, que es del 1,5% los dos primeros años y un 1,9% en el tercero.
Se trata de un planteamiento que, según Rafael López, no están dispuestos a asumir los sindicatos. «No se puede hablar de que las empresas están incremendo de forma notable sus ventas y que por otro lado eso no se refleje en las condiciones salariales de los empleados», enfatiza.
Para las centrales, es absolutamente necesario «que se nos reconozca lo que ha subido la vida. La gasolina se incrementa tanto para los empresarios como para los trabajadores, por lo que estamos convencidos de que lo que pedimos es de justicia».
Defensa
López, además, destaca que «esta vez estamos dispuestos a defender nuestras peticiones con todas nuestras energías, porque entendemos que estamos cargados de razón y que ya no podemos permitirnos perder más poder adquisitivo».
La negociación del convenio también va a abarcar otros aspectos, como prestaciones sociales y permisos, entre otras cuestiones, si bien el dirigente de CCOO reconoce que en estos momentos el principal factor de discrepancia es el salarial, y el motivo por el que en la última reunión se estuvo a punto del bloqueo. Con todo, confían en que las conversaciones avancen en próximos encuentros y que las posturas vayan aproximándose.
