A partir de las 8 de la mañana de hoy, si nada se tuerce, los patos que colonizan el Gorg de l´Omet de Canals abandonarán su pequeño estanque para emprender el rumbo a un nuevo hogar. Un recorrido de 20 kilómetros separa a la mayoría de su destino, un paraje mucho más apropiado y espacioso situado en el río de Bolbaite, donde los animales (alrededor de una veintena) serán acogidos con los brazos abiertos por los vecinos. El ayuntamiento de la población de la Canal se ofreció a adoptarlos en cuanto tuvo conocimiento de la campaña iniciada hace un mes por el consistorio canalense para deshacerse de la colonia descontrolada, que se había convertido en un «problema sanitario» por su excesiva propagación en un parque de mucho paso, en pleno núcleo urbano y cercano a un colegio.

En Bolbaite, en cambio, la alarma la genera un acontecimiento opuesto, relacionado con el pronunciado descenso de la población de patos en los últimos años. En el río que atraviesa la localidad, estos animales disponen de una zona acotada (separada del espacio habilitado para el baño) con una plataforma desde donde se les da de comer. Sin embargo, la natalidad ha caído en picado y las hembras no incuban nuevas crías. La especie, muy arraigada en el municipio, se encuentra amenazada. «El pueblo está muy preocupado porque nos estamos quedando sin patos: antes había muchísimos y ahora apenas se conservan una docena», resume la alcaldesa de Bolbaite, Carolina Mas. Aunque las causas del fenómeno no están claras, la munícipe apunta como posible hipótesis al cambio climático y al descontrol de las temperaturas. Recientemente, unos voluntarios instalaron en el río una jaula a modo de criadero para proteger a los 4 patos que han nacido en el último año, una muestra de que los animales son muy queridos por los vecinos. Por eso, el consistorio acudió de inmediato a la llamada desesperada de Canals y se comprometió a cuidar y a alimentar a los ejemplares.

Más complicada, seguramente, será la operación de traslado activada hoy, de la que se va a encargar la brigada de Bolbaite después de haber examinado previamente el terreno. A falta de comprobar el grado de resistencia de los patos, que ya han pasado la revisión del veterinario, los operarios piensan utilizar comida como reclamo y transportarlos con un remolque.

En Canals, la colonia sobrealimentada por los humanos amenazaba el ecosistema autóctono del parque de l´Omet, donde se ha incrementado la presencia de roedores. El consistorio anunció su intención de regalar los patos entre los vecinos como paso previo para proceder a drenar, higienizar, limpiar y revisar la impermeabilización del estanque, donde también se estudia instalar una bomba de agua para su mantenimiento. A continuación, Medio Ambiente adecuará el espacio e introducirá una nueva colonia de patos autóctonos de cuello verde, sometidos a medidas de esterilización y control desde el principio. Además del consistorio de Bolbaite, tres particulares se presentaron al proceso de adopción: cada uno de ellos se llevará 4 patos (12 en total), el límite establecido por persona.