El Ayuntamiento de Xàtiva ha revocado la autorización administrativa que daba carta blanca al al CD Olímpic para explotar en exclusiva la publicidad interior y exterior del campo municipal La Murta. Ambas partes suscribieron en diciembre de 2015 un convenio encaminado a regularizar el «conflicto de intereses» derivado del uso privativo de la instalación pública. Sin embargo, la entidad deportiva ha sido incapaz de cumplir con la obligación de justificar los ingresos de sus anunciantes, puesto que no ha aportado trimestralmente todos los contratos y facturas que se le requerían.
Pasadas dos temporadas, el ayuntamiento admite que «no ha podido garantizarse la transparencia en el uso y explotación del bien de titularidad municipal», por lo que ha optado por rescindir el contrato con el club y rescatar la concesión. El acuerdo, adoptado por la junta de gobierno el 4 de junio, califica de «grave» la infracción y acusa al ente de «desatender los requerimientos municipales».
En noviembre de 2017, el equipo de gobierno dio un ultimátum a la entidad deportiva para que entregara todos los contratos de publicidad firmados por la explotación del Murta desde la temporada 2015/16, después de que un informe municipal advirtiera de las fuertes contradicciones en las que habían incurrido los diferentes representantes del club a la hora de informar sobre los ingresos obtenidos y los anuncios contratados, con las discrepancias internas y los impagos del Olímpic que desembocaron en la dimisión del expresidente Javier Alcázar en abril de 2017 como mar de fondo. Entre la facturación declarada por una trabajadora del club y la presentada por el secretario, se contabilizaron diferencias de 62.122 euros.
Los informes señalan que, bajo su mandato, Alcázar no aportó copias de ningún contrato publicitario, más allá de una mera relación de empresas anunciantes sin soporte documental. El exjugador dio cuenta de 50 anuncios, mientras que los empleados públicos constataron que se habían contratado 88. El club registró en la temporada 2016/2017, un desplome del 59% en los ingresos publicitarios, que cayeron a 110.000 euros.
Tras el requerimiento municipal y el cambio en la directiva del club, en 2017, el secretario amplió la documentación y aportó 27 contratos al ayuntamiento, además de nueve facturas con pagos en especie, a cuenta o por transferencia. Una vez analizadas las alegaciones de la entidad, sin embargo, el consistorio sigue sin ver acreditados buena parte de los ingresos. La corporación advirtió al club de que el incumplimiento del convenio podría acarrear consecuencias negativas en la concesión de subvenciones, a tiempo que subrayó su obligación de comunicar las posibles irregularidades a la justicia.
Revocación temporal
Después de que el expediente se haya demorado varios meses, la revocación del permiso otorgado al Olímpic para explotar la publicidad del Murta podría quedarse en nada, puesto que llega con la temporada acabada y justo cuando el grupo indio Sudeva se ha hecho con el control del club, reconvertido en Sociedad Anónima Deportiva, tras adquirir 300.000 euros en acciones. En este nuevo escenario, el consistorio se muestra abierto a negociar una nueva concesión de los anuncios en el campo, reformulando las bases y las ayudas municipales y, posiblemente, incluyendo la explotación del bar en el convenio. El nuevo inversor -como avanzó este diario- se ha interesado por quedarse el hotel Murta, con la intención de crear una residencia de jugadores.
