Un gran susto. Así definen los medios de extinción el conato de incendio que ayer hizo saltar las alarmas en torno a las 13.45 horas en la partida forestal de El Alto de Enguera. El origen del fuego se registró en una cabaña turística de madera situada en la parte de arriba del camping de los Carasoles, aunque independiente de esta explotación, en un punto cercano al término de Almansa. Las llamas se propagaron hasta quemar 2.800 m2 de una finca privada, cuyo desbroce hace escasos meses evitó males mayores. La ausencia de matorral y de viento, así como la rápida actuación de los aviones y helicópteros que operaron desde la base de Enguera, permitió que en 3 horas el incendio se diera por controlado después de movilizar un amplio dispositivo de medios.

Las causas del origen del fuego se están investigando.