La concejal del Ayuntamiento de Ontinyent detenida e interrogada por la Policía Nacional el pasado miércoles por su presunta implicación en la desaparición de un cheque de la Cruz Roja, aseguró ayer a Levante-EMV que todo responde a «un malentendido» y garantizó «que se va a aclarar». Virtudes Guillem, titular de Seguridad y de Policía Local en el consistorio ontinyentino e histórica dirigente de Cruz Roja Ontinyent y actualmente voluntaria, podría haber cobrado un cheque de 600 euros. Ella aseguró ayer, tal como manifestó a otros medios, que lo cobró para entregarle después el dinero en efectivo al jardinero que trabaja en las instalaciones. El PP de Ontinyent pidió ayer su cese fulminante. Compromís manifestó que es preferible esperar.

Cruz Roja de Ontinyent denunció el 20 de agosto el extravío de un cheque al portador de 600 euros listo para ser cobrado. Poco después se supo que la concejal, con entrada en la institución ya que es voluntaria, lo había cobrado. La regidora aseguró ayer que la denuncia de Cruz Roja «es normal» y «es lo que tocaba hacer, ya que si ven que desaparece un cheque, lo lógico es que denuncien. Es más „añadió„ yo sé cómo funciona la organización y hay un protocolo muy estricto en cuestión de dinero», señaló Guillem, que fue presidenta de Cruz Roja Ontinyent de 1999 a 2014. Sin embargo, la edil añadió que «denunciaron el hecho, en vez de solucionarlo internamente, porque no sabían que era yo. Si lo hubieran sabido o yo les hubiera avisado, este asunto quedaría en nada. Les hubiera dicho que he cobrado el dinero para pagar al jardinero y ya está». Y añadió que cobró el cheque para dicho jardinero porque éste no podía hacerlo personalmente.

Guillem insistió en que este asunto «se aclarará muy pronto y quedará en nada», insistió. Y añadió que «como en política todo vale, no me sorprende nada que el PP pida mi dimisión». El Partido Popular de Ontinyent exigió ayer al alcalde, Jorge Rodríguez, «que dé explicaciones públicas sobre este turbio asunto, que afecta a la concejala de Seguridad y Policía Local», señaló el regidor Francisco Penadés. «Es un tema grave, que debe tener, preciso, una repercusión lógica y responsable y ésta no puede ser otra que el cese de la concejala por parte del alcalde o su propia dimisión inmediata», insistieron ayer desde el PP. La formación censuró que con esta detención «serán dos los cargos públicos investigados en el Ayuntamiento de Ontinyent: esta concejala y el del alcalde Rodríguez, investigado en el caso Alquería» relativo a las contrataciones en la Diputación de Valencia.

El grupo municipal de Compromís en Ontinyent, por su parte, dijo que «como ya hicimos en el caso Alqueria con la investigación del alcalde socialista de la ciudad, reiteramos nuestro compromiso por la decencia política, la regeneración democrática y el combate contra la corrupción». Pero «como siempre hemos hecho, respetamos la investigación judicial y pedimos prudencia ya que no hay ninguna sentencia. Si se confirman los hechos consideramos que la consecuencia lógica sería la dimisión de la concejala. Entonces y no antes, pediremos la asunción de responsabilidades políticas», manifestó ayer el que será el nuevo portavoz del grupo a partir del próximo pleno, Vicent Xavier Vila. El consistorio manifestó oficialmente a este diario que es un asunto «externo al ayuntamiento» pero que creían la versión de la edil.