Después de tres años de legislatura y unos intensos meses de negociaciones, el antiguo convento de Santa Clara (siglo XIV) está a punto de pasar a manos públicas para albergar previsiblemente el futuro Palacio de Justicia de Xàtiva. Una promesa largamente esperada que ha marcado el debate político local en la última década.

¿Qué supone la compra del monasterio Santa Clara?

Para nosotros implica una satisfacción y un absoluto éxito el hecho de poder presentar la recuperación de lo que es un símbolo para esta ciudad y para el patrimonio histórico, explicando al mismo tiempo que el destino de ese bien va a ser la construcción de un nuevo Palacio de Justicia. La iniciativa va en la línea que ha seguido este ayuntamiento de recuperar patrimonio para ponerlo en valor dotándolo de uso público. En un momento determinado, el anterior equipo de gobierno tuvo la oportunidad de comprar el convento, pero decidió romper con la dinámica histórica de mantener los servicios de la ciudad en el casco antiguo para conservarlo vivo. Muchas inversiones del PP fueron fuera del núcleo histórico, como el CCX o la plaza de toros. Sin ese compromiso previo, ahora no tendríamos para uso público Sant Domènec, ni los museos de l´Almodí y Bellas Artes, ni el conservatorio, ni el Archivo, ni la Casa de la Joventut, ni los juzgados, ni el antiguo hospital. Se trata de poner en valor lo que nos diferencia a Xàtiva, que es nuestro patrimonio. Lo primero es recuperarlo y, si al mismo tiempo podemos darle un uso y un contenido, mucho mejor.

La operación se ha cerrado por 2 millones, una cifra similar a la que abonó la inmobiliaria que compró el bien en 2006.

Se trata de un precio muy beneficioso. Hay que tener en cuenta que es muy complicado que un edificio así sea absorbido por la iniciativa privada. El propio banco tenía claro desde el principo que el primer comprador era la administración pública. Se ha echo un importante esfuerzo para ajustar el importe, teniendo en cuenta un edificio de estas características y sobre todo viendo las posibilidades de futuro que puede tener. Hay que tener en cuenta que, en 2015, el bien fue adjudicado al banco después de que la propiedad acumulara una deuda de 8,4 millones de euros.

¿Por qué es necesario trasladar los juzgados de Xàtiva?

El principal problema que tenemos en la ubicación actual de los juzgados es que no hay espacio para que puedan ampliarse las dependencias, ni tampoco cumplen la normativa en materia de accesibilidad o privacidad. La reforma era tremendamente complicada, incluso más costosa que construir un nuevo Palacio de Justicia. La conselleria puso en marcha el nuevo plan de infraestructuras judiciales e hizo una revisión de los juzgados e Xàtiva en la que se vio que las condiciones del Palau d´Alarcó no son las mejores para poder ejecutar una reforma que permita que se cumpla la normativa. En ese momento, ofrecimos el Monasterio de Santa Clara para que se pueda llevar a cabo la inversión. Así evitamos la tentación de sacar los juzgados fuera del núcleo de la ciudad, una opción que la propia conselleria manejaba porque el equipo de gobierno anterior así se lo había vendido.

Visto en perspectiva, ¿se hace aún más evidente que en 2006 el ayuntamiento tendría que haber ejercido el derecho de tanteo para evitar que el inmueble pasara a manos privadas?

En 2006 ya decíamos que tenía que buscarse una solución para que Santa Clara pasara a manos públicas. Ahora vemos que se han perdido 12 años en los que podría haber estado terminado el Palacio de Justicia o cualquier otro tipo de equipamiento que hoy sería una realidad con una puesta en valor del antiguo convento. Lo que decíamos entonces lo seguimos diciendo ahora: ha de ser la iniciativa pública la que adquiera el inmueble, porque hemos visto que la privada, a pesar de los grandes proyectos y de la supuesta voluntad de inversión, las circunstancias económicas los han hecho inviable totalmente Lo que entonces ya se podía prever lo hemos tenido que hacer 12 años después con este cambio de gobierno.

¿Cómo puede ser que el Plan Especial de protección de Santa Clara todavía no esté aprobado tantos años después?

El retraso es excesivo, pero hemos trasladado a la conselleria correspondiente cuál es la voluntad del equipo de gobierno y de la propia Generalitat, por lo que deberían ser mucho más diligentes a partir de ahora. El Plan Especial es necesario para definir las actuaciones en el BIC y esperamos que pueda estar en este 2018. Cuando entramos a gobernar en 2015 nos dimos cuenta de que el documento estaba parado en el ayuntamiento y de que no se había traslado a la comisión de Urbanismo, por lo que lo enviamos inmediatamente para que se pudiera resolver lo antes posible.

¿Qué van a hacer para intentar recuperar el patrimonio que desapareció del monasterio cuando se fueron las Clarisas?

Desde la adquisición del inmueble hemos estado trabajando codo con codo con el Banco Santander para que las piezas que quedan en el convento no fueran expoliadas. Hemos tenido de forma exclusiva la llave del convento y siempre han sido trabajadores municipales los que han limpiado y adecuado la iglesia para poder abrirla el 5 de agosto, porque entendíamos que no se podía permitir visitas externas. Cuando el convento se declaró Bien de Interés Cultural (BIC) es cierto que hubo una serie de piezas de las que tenemos constancia que han aparecido en el mercado de antigüedades y que serían muy difíciles de recuperar. No obstante, en la medida de nuestras posibilidades vamos a intentarlo.

¿Qué pasará con el cuadro de Vicente López, «La última cena», concebido para presidir el refectorio de Santa Clara?

Es otro de los interrogantes. La propiedad es de quien es y la cesión está hecha al ayuntamiento. Tendremos que abrir un proceso de diálogo para posibilitar que el cuadro vuelva a su lugar original. También es cierto que no será pronto, porque habría que actuar previamente en la parte monumental del convento y tendríamos que garantizar que se dan las condiciones adecuadas. Por ahora, el cuadro está a buen recaudo y hasta que no tengamos una solución clara no haremos nada.

¿El ayuntamiento va a endeudarse para adquirir Santa Clara?

No va a haber endeudamiento alguno. El banco ha aceptado nuestras condiciones y vamos a poder seguir desplegando nuestro plan de reducción del pasivo pese a que incrementamos las inversiones año tras año.

¿Considera cumplidas sus expectativas en materia de recuperación del patrimonio?

La cantidad de patrimonio que tiene Xàtiva es muy elevada, pero hemos estado trabajando en muchos frentes. Ha habido una apuesta importantísima por las ayudas directas a la rehabilitación de viviendas con el programa Arru, que ya se está notando. Estamos a la espera de que la diputación apruebe el proyecto de rehabilitación de la ermita del Puig y de inmediato iniciaremos las obras. Hemos adecuado la plaza del Mercat y estamos pendientes de que el Ministerio de Fomento pueda ayudarnos a para seguir con la rehabilitación de del exconvento de Sant Domènec. Igualmente, hemos recuperado el museo del Corpus, que se podrá inaugurar antes de acabar el año y hemos rehabilitado el inmueble municipal de la calle Engai para uso del área de Bienestar Social. Son muchos los frentes que tenemos abiertos.