El Ayuntamiento de Ontinyent ha iniciado el proceso de participación vecinal para rediseñar la calle y la plaza de Sant Antoni, en el barrio de Poble Nou. La actuación fue una de las propuestas más votadas en el proceso Ontinyent Participa 2018 y antes del verano fue objeto del diseño por parte de un «grupo motor» integrado por regidores, técnicos y representantes vecinales. Este grupo se reunió ayer en el consistorio con el alcalde, Jorge Rodríguez, para dar comienzo a un proceso que «quiere dar continuidad a la línea del gobierno de Ontinyent de implicar cada vez más a la ciudadanía en la toma de decisiones», indicaba Rodríguez.

El proceso iniciado ayer incluye talleres, reuniones y una jornada abierta que se celebrarán durante las próximas semanas y hasta noviembre, para finalizar en diciembre con una presentación pública del proyecto elegido para la reurbanización de Sant Antoni. El concejal de Territori, Jaime Peris, señalaba que esta reurbanización también está contemplada en el Pla de Mobilitat Urbana Sostenible (PMUS). La iniciativa participativa de la calle Sant Antoni se desarrollará contando con el equipo consultor que redactó el PMUS, algo que según Peris «nos garantiza que se van a tener en cuenta las líneas maestras del plan, mientras los vecinos de la zona participan del diseño».

Después de la reunión de ayer, el cronograma del proceso determina que en la primera quincena de octubre tendrá lugar un paseo urbano que dará paso a un diagnóstico propositivo. En la segunda quincena tendrá lugar una jornada abierta y un taller específico con gente mayor. En noviembre, en la primera quincena del mes, habrá un nuevo taller de valoración de estrategias, así como una reunión técnica. Finalmente, en diciembre se hará una presentación pública con las conclusiones y resultados del proceso, para después redactar el proyecto de ejecución y licitarlo.

La concejala de Ciutadania, Virtudes González, recordaba ayer que además de este proceso de la calle Sant Antoni, «tanto Ontinyent Participa como el PMUS son otras muestras del impulso a la participación vecinal por el que apostamos, pero también el diseño de la zona verde del Orútjol en el barrio de Sant Rafel; o la elección de la nueva zona de juegos de la Glorieta que harán la próxima semana los escolares de primero a cuarto de Primaria de los colegios de la ciudad», apuntaba la edil Virtudes González.