Todo listo para la inauguración mañana sábado (20 horas) de la remodelación de la plaza de la Beata Inés de Benigànim, una obra que persigue dar prioridad al peatón y embellecer un emblema del urbanismo de la localidad. Con una inversión de 230.000 euros, la obra cuenta con puntos de luz soterrados, suprime toda barrera arquitectónica existente y delimita claramente el espacio, mucho más reducido ahora, por el que podrán transitar los coches. Pero no se podrá aparcar. Otra de las mejoras será el mayor lucimiento de la iglesia de las Agustinas Descalzas. También estarán soterrados los contenedores. El peatón será el gran beneficiado de la actuación, ya que las reservas de espacio para las personas son ahora enormes y el mobiliario urbano contribuye a humanizar la zona. La alcaldesa de Benigànim, Amparo Canals, ha manifestado su satisfacción por haber llevado a buen puerto esta necesaria reforma, ya que la intensidad del tráfico y el estacionamiento masivo de coches habían desnaturalizado el que es el eje neurálgico de la localidad de la Vall.