Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Curva ascendente para los presupuestos de Ontinyent

El proyecto de presupuesto municipal de Ontinyent para 2019 era desvelado esta semana por el batle, Jorge Rodríguez, flanqueado por su chef de los números, Joan Sanchis. El pastel anda guarnecido de dígitos millonarios. Del total de casi 35 millones de euros, calculados en ingresos, y por ende en gastos, pusieron énfasis en esos diez millones que se invertirán en «mejorar la ciudad». Fue un anuncio a base de grandes titulares. La calderilla la explicarán desde cada área municipal. Lo que no fue óbice para que mostraran la patita de sus debilidades, como esa asignación que distribuirá, por primera vez, el Consell Municipal d'Esports cifrada en 100.000 euros. Resulta sintomático que no hiciesen ningún símil cultural, seguramente porque piensan que las actividades y la dinamización en esa materia son menos populares electoralmente. Confiemos en la providencia, y que cuando desmenucen la millonada sorprendan a la parroquia con alguna bicoca.

La solemnización del proyecto llegará antes del próximo 1 de enero, vía pleno municipal. Sin que se esperen cambios notorios, dada la holgada mayoría del partido socialista: la que el divino electorado ontinyentí le otorgó, en mayo de 2015, para que ejerza ese super poder gubernamental que conduce Rodríguez desde entonces. Por lo que se espera, a no tardar, que obtenga la oportuna fumata blanca, seguida de devotos cánticos de aleluya.

Y como bien dice el argot popular, siempre llueve sobre mojado. Así que la segunda taza presupuestaría nos la servía la consellera María José Salvador sobre el credo, el de sumar y restar, verbalizando el compromiso del Consell de destinar 4.256.000 euros para finalizar las obras en 2020 del nuevo hospital de Ontinyent, confirmado ayer con el concurso. Y sin ir de rogativas a Lourdes. La homilía laica con la que iluminó al personal se inscribe en el contexto de «explicar los presupuestos del Consell para 2019 y hacer balance de los tres años de gobierno», dijo aquí en su visita. Un contenido que se suele insertar en los periódicos con el rótulo de publicidad.

Una herida abierta. No cicatrizó bien en su momento la herida que se abrió en torno a los satélites que rigen los destinos y órbitas de esa señera entidad deportiva comarcal llamada Ontinyent CF, y ahora todo son dolores y perplejidades, si no hostilidades. Con la SAD como arma arrojadiza entre los de Luis Ortiz y el representante de Elite Sports, Adrián Márquez. Tras diversas escaramuzas, llegó la asamblea del club en la que los letrados, con el ontinyentí Jaime Bernabeu al frente, fueron mano de santo y pusieron cordura a un asunto tremendamente enladrillado que aún no ha terminado. A mayor perplejidad de la hinchada y aficionados a ese deporte. Y menos mal que en este circo donde los enanos crecen con tanta rapidez, el conflicto entre el entrenador que no acaba de salir, Mullor, y el que no acaba de entrar, Parras, ha visto la luz tras varias semanas de oscuridad.Pero no todo son noticias agrias en la entidad de el Clariano, ya que recientemente se ha sabido que muchos partidos que dispute el Ontinyent podrán verse por la televisión autonómica À punt. Como los viejos tiempos de canal 9 (o Punt 2) cuando el equipo estaba también en segunda B.

Compartir el artículo

stats