La Diputación de València ha servido en bandeja de plata a los ayuntamientos de la Costera, la Canal y la Vall d'Albaida una inyección de 6,6 millones de euros a través del Plan de Inversiones Financieramente Sostenibles (PIFS) de 2018. Una bocanada de oxígeno a cinco meses de las elecciones municipales que da vía libre a 145 actuaciones en las tres comarcas de aquí a octubre de 2019.

En Xàtiva, el programa contribuirá a aliviar un poco el monumental colapso que se registra a diario en las inmediaciones del hospital Lluís Alcanyís por la falta de plazas de aparcamiento. La institución provincial ha dado luz verde a una ayuda de 62.000 euros solicitada por el consistorio para la adquisición de una parcela agrícola de 4.551 metros cuadrados pegada a la parte trasera del centro sanitario. La operación aún está negociándose, a expensas de unos informes técnicos de viabilidad. La idea es trasladar el helipuerto al nuevo terreno, mucho más cercano y de más fácil acceso al área de Urgencias. El punto actual de aterrizaje de helicópteros sería ocupado por plazas para coches.

La medida no eliminará ni mucho menos la problemática del estacionamiento, pero ayudará a paliarla, desatascando una situación enquistada. La corporación ha barajado otras opciones de solares cercanos, pero ha tenido que descartarlas por encontrarse fuera de ordenación. El regidor de Movilidad, Miquel Lorente, subraya que la ampliación proyectada se complementará con la creación de un aparcamiento disuasorio no muy lejano, frente al CRIS y el CEEM, junto a la carretera de Alzira, donde un autobús lanzadera recogerá a los usuarios que van al hospital. El IVACE concedió anteayer al ayuntamiento una ayuda de 25.000 euros para esta actuación, cofinanciada al 50%. Dentro del PIFS, Xàtiva también ejecutará otro aparcamiento periférico en la Avenida Juan Francés (31.353 euros), así como el nuevo vial por detrás de la Ciutat de l'Esport y el Plan de mejora del alumbrado.

Atracón de inversiones

La renovación de la iluminación es una de las inversiones predilectas de los ayuntamientos con el programa provincial. Algunos han optado por destinar todos los fondos concedidos a una única actuación. Es el caso de Ontinyent, que reserva 231.189 euros para habilitar instalaciones deportivas en cuatro parque de la localidad. O de Quesa, que sustituirá las conducciones de fibrocemento de agua potable en cinco calles con una inversión de más de 100.000 euros. También de la Pobla del Duc, que acondicionará una nave municipal como sala polivalente.

Otros consistorios, como el de Fontanars dels Aflorins, distribuyen el dinero para financiar hasta 13 proyectos: desde la adquisición de señales y contenedores hasta la renovación de los carteles de bienvenida al pueblo o la construcción de un jardín en el patio de las escuelas viejas. El plan representa un acicate contra la despoblación. Carrícola, con solo 95 habitantes, dispondrá de 70.000 euros para transformar la antigua Casa del Mestre en alojamiento rural, adquirir una furgoneta eléctrica municipal o instalar un punto de recarga para vehículos eléctricos, entre otros. Bicorp creará un carril bici y ampliará el polideportivo, mientras que Beniatjar adecuará un nuevo comedor escolar en su escuela, soterrará la línea eléctrica en el paseo de la piscina y acondicionará una vivienda social.

El PIFS también alienta el remozado del patrimonio municipal. Benissuera dedicará 62.368 euros a la rehabilitación integral del Palacio de Bellvis, mientras que Bolbaite continuará con la consolidación de la Torre Mayor del castillo, a tiempo que construirá una nueva aula de 2 años en su colegio. El acondicionamiento de caminos, redes de saneamiento, agua potable y piscinas son otras inversiones estrella, junto al asfaltado, la repavimentación viaria y las mejoras de seguridad. Montitxelvo adecuará por completo y legalizará la instalación eléctrica del polideportivo y l'Olleria reemplazará la actual caldera del colegio Sanchis Guarner por gas natural.