El Eset Ontinet vive un momento dulce por la magnífica campaña que está cuajando, líder indiscutible del grupo B de la 1ª Nacional con once triunfos y solo dos derrotas. Atrás quedan años de sufrimiento para conseguir la salvación o incluso para diseñar una plantilla mínimamente competitiva que pudiese oponer resistencia durante el curso liguero. A esta periodo de bonanza de resultados del cuadro colegial ha contribuido en gran medida la llegada de Nico Sánchez (València, 1975), el timonel de este barco que ha sabido guiar a su tripulación sacando la mejor versión de todos ellos.
Los números que presenta el equipo impresionan, rozaban la utopía a principio de temporada donde «de entrada no te lo planteas, es algo que te gustaría que ocurriese pero siendo sincero y por la experiencia en otras temporadas, es prácticamente imposible», reconoce el técnico valenciano. De hecho, el primer objetivo de Nico cuando fructificó su compromiso con el club ontinyentí se centraba en aumentar la presencia de jugadores de la ciudad en el máximo exponente masculino de la entidad. Un fin que se ha conseguido hasta cierto punto con nombres ya habituales como los de Gonzalo Amador o Jordi Soler, a los que se ha unido Jorge Mancebo, quien su estatus inicial pasaba por promediar «cero minutos por partido, con escasa aportación en ataque. Sin embargo, está jugando y está anotando con un rol de tirador muy interesante. En definitiva, hay jugadores de la casa pero hace falta más protagonismo y eso se lo tienen que ganar ellos», puntualiza el entrenador del Eset Ontinet.
Uno de los pilares básicos de este edificio tan sólido radica en «el ambiente que hay en el grupo. No es solo lo que aportan en pista sino también en el trabajo del día a día», asegura un Nico Sánchez que ha añadido entre los aspectos determinantes de su bloque el volumen competitivo «porque once partidos no se consiguen únicamente con la suerte. Es un conjunto especial porque no tenemos un modelo típico de base, alero pívot sino que son casi todos jugadores exteriores. Pero en la pista es un grupo muy guerrero y con mucha capacidad competitiva».
Clasificación a la fase de ascenso
Con los números que presenta el equipo cuando se llevan disputadas dos jornadas de la segunda vuelta, el acceso a la fase de ascenso, a la cual acceden los cuatro primeros de cada grupo, podría ser cuestión de semanas. Con la prudencia y el respeto por sus adversarios, Nico Sánchez prefiere apostar por la filosofía cholista del «partido a partido porque lo demás queda muy lejos. De todas formas, firmaría meterme entre los cuatro primeros. A partir de ahí, cuando nos midamos a los fuertes del otro grupo, entonces valoraremos con la directiva, aficionado y el pueblo si estamos preparados y si hay ilusión para dar el salto o no. Son seis partidos y es cuando realmente ves si estás apto para afrontar un play off al cual no llegas por suerte sino porque te lo has ganado», apunta el entrenador valenciano, al que se le pone la piel de gallina cuando escucha la palabra ascenso a EBA, un sueño «increíble cuyo valor sería más importante que cualquier prima porque se conseguiría con un club al que vi nacer hace 20 años», concluye un ilusionado pero prudente Nico Sánchez.
