Unos gamberros la emprendieron el sábado con una furgoneta sanitaria de la empresa Ambulancias Vallada que su conductor había dejado estacionada en la calle José Iranzo de Ontinyent después de finalizar su jornada laboral, a las 19.45 horas del viernes. Los autores del ataque rajaron las cuatro ruedas del transporte y forzaron una ventana trasera latera para rociar con polvo de extintor todo el interior. El conductor fue advertido por una vecina de que la ambulancia tenía tres ruedas pinchadas (la cuarta no llegó a vaciarse por completo), tal y como éste pudo comprobar el domingo.

La misma noche del sábado se produjeron diversos actos vandálicos en un garaje de la zona y se sustrajeron diversos extintores. La gerente de Ambulancias Vallada ha denunciado los hechos ante la Policía Nacional. Los daños sufridos no estarían cubiertos por el sguro de la firma. El conductor de la furgoneta sanitaria observó diversas huellas de pisadas en la puerta del acompañante coincidentes con las existentes en el parque colindante, donde también se encontró polvo de extintor.

Desde la empresa afectada han lamentado «que haya gente que se dedique a realizar estas barbaridades solo por el mero hecho de divertirse. No es lo que cuesta reparar las tres ruedas rajadas o limpiar la ambulancia, sino el hecho de querer hacer este daño sobre un vehículo que se dedica al servicio público y a tranpsortar pacientes, personas enfermas, con movilidad reducida y enfermos crónicos», lamentan desde Ambulancias Vallada.