A falta de grandes volúmenes que obliguen a anticipar la operación o por la logística de los talleres, que no empiezan en una ciudad hasta que no acaban en otra, el caso es que la Plantà de Xàtiva iba ayer a medio gas. Y es mucho decir. Es casi una tradición que Murta-Maravall sea la más madrugadora. El cadafal de Palacio i Serra, que este año presume de nuevo de Millor Ninot de Xàtiva pese a militar en la sección primera, ya estaba casi completo en sus piezas principales ayer por la tarde. Sólo había otra falla con parecido adelanto, la de Selgas-Tovar.

Pero el retraso y que haya demarcaciones donde no se ve aún ni señal de una futura falla no preocupa a nadie. Una vez descarguen los artistas las piezas grandes, tiren de grúa y coloquen el remate, se activará como siempre el enorme dispositivo que cada comisión posee: decenas y decenas de falleros que colaboran hasta altas horas de la madrugada con toda la logística que comporta tener lista la falla para la mañana del día 16.