En Fontanars dels Alforins ha cundido la alarma entre los vecinos ante una oleada de robos que en el último mes se ha saldado con robos en siete fincas situadas en las zonas diseminadas de la localidad de la Vall d'Albaida, cuya seguridad depende de la comandancia de la Guardia Civil de la Font de la Figuera. Los vecinos denuncian la falta de efectivos de la benemérita en el puesto de la Font, en la Costera, del que dependen, además de la Font y Fontanars, otras localidades próximas como Vallada o Moixent. Una amplia demarcación, además con una extensa superficie de término en estos municipios, que requiere de gran vigilancia y efectivos.

Los vecinos señalan que los efectivos de la Guardia Civil para atender estos municipios no llega a una decena, por lo que reclaman un incremento de guardias civiles para garantizar la seguridad de los ciudadanos. Los robos en las siete masías se han centrado en la sustracción de objetos, la mayoría de ellos por la noche, sin que los propietarios estuvieran dentro. El puesto de la Guardia Civil de la Font de la Figuera, según los denunciantes, no está abierto las 24 horas del día y en las horas donde son más habituales estás acciones delictivas, entre la tarde y la noche, está cerrado. Las patrullas nocturnas son escasas, denuncian.

La Guardia Civil detuvo días atrás a una persona por el robo de placas solares y baterías, valoradas entre 3.000 y 4.000 euros, en una casa de la Font. Los agentes lo detuvieron en un control rutinario en el que al hacerle abrir el maletero le descubrieron los objetos sustraídos. Los vecinos de estos municipios, ante la oleada de robos y la alarma social creada, reclaman medidas y efectivos para garantizar su seguridad.