El «sí» a la implantación de la jornada continua arrasó el 1 de abril en el CEIP Jacinto Castañeda de Xàtiva. Un 82,3% de los participantes en la consulta se pronunciaron a favor del cambio de modelo. Esta opción fue secundada de forma claramente mayoritaria por las familias, un resultado que ha puesto en valor la corriente de partidarios para contrarrestar el comunicado difundido por un grupo de padres y madres del «no» que sembraba dudas sobre el proceso.

Tanto algunas de las integrantes de la mesa electoral que supervisaron o vivieron la consulta en primera persona durante una extenuante jornada de 12 horas como diversos padres favorables al cambio de horarios han querido salir al paso de unas acusaciones que tachan de «calumnias» y «falsedades» y que consideran dirigidas a «confundir» y a manchar de manera intencionada el resultado de la votación, cuya limpieza y transparencia garantizan. Consideran que los ataques son una rabieta «de alguien que no ha seguido de cerca el proceso» y lamentan el mal ambiente que se ha creado en el colegio.

Según el escrutinio definitivo de la jornada electoral, en el Jacinto Castañeda solo se contabilizaron 99 votos contrarios a la jornada continua y 461 votos favorables sobre un total de 560 participantes (y no de 170, como este diario publicó por error al hacerse eco de unos resultados provisionales difundidos por la conselleria). El conflicto se produce porque, para autorizar el cambio de horario, se establece que el «sí» ha de recabar al menos un 55% de apoyos sobre el censo total del colegio (el total de votos posibles), que en este caso es de 837 padres. Así, en el recuento definitivo, un solo voto decantó el desenlace a favor del cambio de modelo.

La Conselleria de Educación aún ha de resolver el recurso de alzada interpuesto por los defensores del «no» para tratar de invalidar una de las papeletas, que iba firmada. Tras las consultas pertinentes, la comisión interna de coordinación del proceso decidió que sí era válida. En cualquier caso, la corriente partidaria de la jornada continua también cuestiona la anulación de otros votos que entienden que eran válidos y que habrían decantado la balanza con más claridad. Integrantes de la mesa electoral han defendido el cumplimiento de la ley y, junto a otros padres, se muestran perplejos por unos ataques que se han difundido públicamente sin haberse comunicado previamente a los agraviados. De este modo, niegan tajantemente que se vulnerara la protección de datos y que se usara información confidencial para avisar a un participante cuyo voto se anuló, a tiempo que destacan el intenso trabajo desplegado por el profesorado y el centro para diseñar un proyecto de jornada continua adecuado a los niños y a sus familias.