La Zapatería Eva Alfaro de l'Alcúdia de Crespins va a bajar la persiana después de 55 años de actividad en el entronque entre la Avinguda la Pau y la calle La Creu. La franquicia ha comenzado a liquidar su stock tras anunciar el cierre. Los propietarios aseguran que el establecimiento no es viable y atribuyen la decisión al retraso de las obras del paso subterráneo, que han permanecido meses en suspenso y que han comportado interrupciones y cambios de sentido en el tráfico desde hace tiempo en la zona donde se ubica el negocio. "La calle lleva cortada más de un año y aún no se sabe cuando la abrirán", afirman en el comercio.

Aunque el consistorio ha anunciado que en unos días la maquinaria por fin se pondrá a trabajar para terminar los trabajos que se eternizan en los alrededores de la estación de tren, en la franquicia familiar desconfían porque "ha habido muchos incumplimientos" en los plazos, a tiempo que se quejan de la instalación de unos bloques de hormigón que desde septiembre de 2018 impiden el paso de los coches procedentes de la avenida, una medida adoptada por el consistorio apelando a criterios técnicos y a razones de seguridad. "No están haciendo nada por las empresas. Podrían poner facilidades, al menos abrirnos la calle, pero nada", lamenta Horacio Alfaro, que regenta la zapatería. "Llevo toda mi vida aquí. Es muy amargo cerrar, pero no nos queda otra salida. Todos me dicen que aguantemos. A mí mi corazón me dice que siga, pero mi bolsillo me dice que no", resume. El negocio fue fundado por su padre, que hace décadas se instaló en la localidad de la Costera procedente de Elx junto a su familia. La franquicia mantiene abierta la zapatería de Xàtiva y otros cuatro establecimientos en diferentes poblaciones. "La de l'Alcúdia de Crepsins es la primera que abrimos y la que más cariño le teníamos. Pese a estar en un pueblo pequeño vendía mucho, pero cada vez nos lo han puesto más difícil", asegura Horacio.

El Ayuntamiento de l'Alcúdia de Crespins informó el 24 de abril que las obras del túnel del paso a nivel de las vías del tren "ya van en marcha con una inversión de 365.176 euros", una cantidad compartida entre la Diputación de València y el consistorio, que ha pedido disculpas por el retraso de los trabajos. Frente a las críticas de los comerciantes, fuentes municipales defendieron que el acceso a la calle la La Creu estaba garantizado y limitaron las incomodidades, apuntando a las complejidades del proceso administrativo para explicar el retraso de las obras.